La cumbre de Londres se compromete a forjar el "nuevo marco constitucional en Bosnia"

La primera conferencia internacional dedicada a la aplicación de la paz en Bosnia se cerró ayer en Londres con la promesa de la comunidad internacional de "establecer un nuevo marco político y constitucional en Bosnia" surgido de unas elecciones libres a celebrar en 1996. La unanimidad se impuso entre los representantes de los 40 países y la docena de organizaciones internacionales, tras la incertidumbre creada por la crisis de los pilotos franceses. No fue posible, sin embargo, el acuerdo en el reparto de la factura de la reconstrucción y el realojamiento de los 2,7 millones de refugiados o desplazados.

De momento, el problema ha quedado aplazado a un próximo encuentro a celebrar los días 20 y 21 en Bruselas entre representantes de la Unión Europea (UE) y del Banco Mundial. Éste ha cifrado en 4.900 millones de dólares (unos 642.000 millones de pesetas) el monto de la ayuda necesaria a lo largo de tres años para la reconstrucción de Bosnia. De éstos, 600 millones de dólares deberían de donarse de inmediato.La conferencia de Londres establece una nueva estructura civil en Bosnia, que sustituye a la Conferencia Internacional para la ex Yugoslavia, y de la que Carl Bildt será su máximo responsable.

El clima de tensión -el ministro español de Exteriores flamante nuevo secretario general de la OTAN, Javier Solana, lo calificó por la mañana de "gravísimo"- que planeó durante parte de la jornada de clausura y los temores sobre la supervivencia del proceso de paz quedaron superados en un documento conjunto de respaldo a lo firmado en Dayton, el 21 de noviembre. Francia consiguió la solidaridad absoluta por la suerte de sus dos pilotos en poder de las fuerzas serbobosnias. Con lo que se resolvieron las dudas sus citadas por el ultimátum de París a los líderes serbios para la entrega de éstos, que expira esta medianoche. [El vicepresidente de los serbios de Bosnia, Nikola KoIcevic, declaró a la BBC que esperaba poder facilitar hoy noticias sobre los pilotos franceses informa France Presse].

El documento final de la conferencia insiste en que la firma solemne del acuerdo de paz de Dayton se celebrará según lo previsto el 14 de diciembre en París. Las 12 páginas de que consta el documento son elocuentes respecto a la magnitud de la tarea que representa la puesta en marcha del acuerdo de paz en Bosnia y al grado de consenso internacional alcanzado.

Preocupación por Sarajevo

La preocupación europea por la supervivencia plural de Sarajevo quedó reflejada con la propuesta de creación de un consejo municipal de transición en esa ciudad, encargado de velar por la seguridad de su población multiétnica. A este respecto se apuntó la necesidad de que las fuerzas de la OTAN permanezcan en los barrios serbios de la capital bosnia más allá de los 12 meses fijados para la misión militar.

La responsable de las Naciones Unidas para los refugiados, Sadako Ogata, hizo un llamamiento a la comunidad internacional para recabar los fondos necesarios que permitan facilitar unas condiciones de vida dignas a los refugiados que se decidan a regresar a sus casas. En una república de 4,5 millones de habitantes, una diáspora de 2,7 millones convertiría en papel mojado las elecciones democráticas de las que depende toda la aplicación del plan de paz.

La organización de las elecciones queda en manos de una misión de la Organización de Seguridad y Cooperación Europea (OSCE), que enviará en breve un equipo de 250 personas que abrirá 30 oficinas en la república exyugoslava. Las tensiones entre la UE y EE UU (o mejor dicho, entre Francia y EE UU) quedaron de manifiesto en la incapacidad de la reunión de Londres para consensuar el nombre del que será el responsable de la OSCE.

Al término de la reunión, el ministro de Exteriores francés, Hervé de Charette, recalcó que la UE, que ha gastado ya mil millones de dólares (unos 122.000 millones de pesetas) en Bosnia a lo largo de los casi cuatro años de conflicto, "contribuirá con su parte justa, pero EE UU y otros países deben participar también de forma equitativa en los gastos" de construir un Estado de derecho en Bosnia.