_
_
_
_

Informes policiales atribuyen a Perote la entrega a ETA de información sobre planes de negociación

El coronel Juan Alberto Perote, ex número dos del Cesid, mantuvo contactos con ETA y filtró a la banda terrorista un plan de negociación después de abandonar el servicio de información militar en noviembre de 1991. Así lo reflejan informes de la Ertzaintza (policía vasca) fechados en 1994. Mandos del Cesid aseguran que Ios contactos [entre Perote y ETA], si los hubo, se realizaron sin el consentimiento del centro". Perote, encarcelado en la prisión militar de Alcalá de Henares (Madrid), negó en una nota que hubiera mantenido cualquier contacto con la banda terrorista. Los informes policiales analizan abundante documentación interceptada a ETA en 1994. Los documentos citan reiteradamente con nombre y apellidos al coronel y destacan la trascendencia de la información que supuestamente le hizo llegar.

Más información
Alta valoración y desmentido

La documentación intervenida a ETA consiste básicamente en cartas cruzadas entre sus, dirigentes Carlos Almorza, Pedrito de Andoain; Kepa Pikabea Ugalde y otros miembros de la dirección etarra. Los escritos confirman el papel de intermediario entre Juan Alberto Perote y la banda que desempeño desde el verano de 1993 el empresario vasco Francisco Javier Abásolo (ver EL PAÍS del 15 de noviembre). Abásolo, detenido en Francia en 1993 por un supuesto intento de estafa a la banca Rothschild, convivió durante 19 meses en la cárcel de Fleury-Merogis con los dirigentes etarras Almorza, Miguel Gil Cervera y Sabino Euba.El informe policial destaca un párrafo de una carta de Almorza a un colaborador de la banda que confirma la filtración, por parte de Perote, de un plan de negociación (supuestamente, del Gobierno): "A la organización ya le, paso yo lo de Alberto Perote y el calendario que tienen con nosotros; por lo tanto, todo lo que no concierne al trabajo vuestro romperlo sin consultarlo más que con una persona que tú elijas".

El documento policial detalla también cómo los dirigentes etarras debatieron la posibilidad "de poder facilitar al señor Alberto Perote el camino hasta Santo Domingo para mantener contactos con el interlocutor oficial de la banda armada, Eugenio Etxebeste, Antxon".

Fechas coincidentes

Almorza es muy explícito sobre la filtración. "No solamente hemos tenido noticias de lo que hemos explicado, hasta ahora", escribe el etarra, "sino que conocemos el plan de negociaciones que tienen previsto con nosotros y que te expongo a continuación: mayo 1994, comienzo; octubre-noviembre, conversaciones; diciembre, preacuerdo; 1995, soluciones; 1996, fin en el segundo semestre o primeros de 1997"Tales fechas coinciden con un plan entonces diseñado por Interior, según un ex alto cargo. El dirigente etarra manifiesta el gran valor que otorga a Perote como fuente de informaciones: "Quisiera decirte que hasta ahora todo lo que hemos dicho se ha cumplido a rajatabla y no tenemos ninguna duda de que esta historia sea cierta también,(la pasó Alberto)".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Esa misma carta indica, refiriéndose a un cuñado del intermediario Abásolo: "Le vamos a dar el recado de que le diga a su amigo Alberto que estamos dispuestos a llevarle a él [a Perote], posibilitarle el camino para Santo Domingo, para que esté con Antxon [...]". Añade que "en junio del 93 estuvo Alberto Perote buscándonos por Vitoria y trataron de estar con alguien, pero no lo consiguieron (HB)".

Paradójicamente, aquella iniciativa de Perote arruiné una operación oficial de negociación que dirigía el equipo de Rafael Vera, entonces secretario de Estado para la Seguridad, según recuerda un miembro de dicho departamento.Este ex alto cargo dice que tuvo noticia de una oferta de, "un tal Abásolo" a la dirección de ETA. "Su oferta debió de ser muy buena. Porque ETA nos descalificó a nosotros como interlocutores. Y se desdijo de una tregua de seis meses que debía anunciar después de las elcciones. Estuvimos preguntando y nadie supo decirnos quién era Abásolo. Sólo ahora hemos sabido que Abásalo era el intermediario de Perote".

El citado ex alto funcionario señala un hecho inquietante: "ETA sabía, cada uno de nuestros pagos antes de que los diéramos. Sabían que íbamos a reunirnos con determinados dirigentes de Herri Batasuna antes de que se lo comunicáramos. Tenían mucha información sobre nosotros. Alguien hizo llegar nuestros planes a ETA".Consultado por este diario sobre todos estos aspectos, Vera declaró: "La historia de la tregua frustrada con ETA es cierta en todo lo que ustedes dicen, pero no quiero hacer ningún comentario".

La posibilidad ofrecida a Perote por Almorza de visitar a Eugenio Etxebeste en Santo Domingo causó una reacción airada de la dirección de ETA. En la contestación, a Almoza, la cúpula de la banda se, pregunta: "¿Por qué se les puede facilitar el camino a Santo Domingo? ¿En función de qué análisis? ¿Realizado por quién?

ETA, en abril de 1994, cuando Perote era un desconocido para la opinión pública citaba los siguientes datos sobre él: "Alberto lleva la CIA en Euro pa, para ello utiliza sus trabajos como coartada Jefe de seguridad de Repsol. Vicepresidente de la Federación de Triathlon o Pentathlon". Perote fue asesor de seguridad de Repsol hasta hace. unos meses y ha estado vinculado a la Federación de Pentathlon.De las cartas se desprende que los cabecillas etarras desean preservar al máximo la identidad de su fuente. Así, Almorza prohíbe a sus enlaces, cuando hablen con Abásolo, "comentar nada de la CIA, de Alberto el mínimo comentario, te digo, ya que, si se da cuenta, se va todo al carajo".

El dirigente etarra considera perfectamente viable obtener información delicada del ex agente del Cesid, hasta el punto de ordenar a sus enlaces que soliciten de Perote documentos de los servicios secretos sobre un supuesto confidente de la policía que coincidiría con un destacado dirigente político vasco. "Se lo pedirá a Alberto", afirma: Almorza, quien reitera, sus recomendaciones sobre la necesaria discreción sobre la fuente.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_