Talento, trabajo y oportunismo, claves del éxito de las Labèque

Las apariencias no traicionan la realidad: las hermanas Labèque forman el conjunto perfecto de pianistas a modo femenino de los hermanos Gershwin. Kada y Marielle son dos artistas dotadas de una genialidad y brillantez imaginativa única; ellas aseguran que "el talento sin trabajo y oportunismo no significa nada". Lo cierto es que reunieron todo. Los que asistan al concierto organizado por Juventudes Musicales que darán el jueves 30 de noviembre en el Auditorio Nacional acompañadas por Gonzalo Rubalcaba podrán comprobario.

Las dinámicas y refinadas Katia y Marielle, ambas de signo Piscis pero nacidas con dos años de diferencia (1950 y 1952) son como las notas menor y mayor, distintas pero con caracteres complementarios. Mientras Katia es abierta, le gusta la música moderna, su novio es el guitarrista de jazz John McLaughlin y toca las notas altas en el piano, Marielle es más reservada, prefiere los compositores clásicos, su novio es el director ruso Semyon Bychkov y toca las notas bajas. "Somos extremadamente diferentes. Por ello estamos juntas. La clave de nuestro éxito es la respectiva autonomía", señala Katia que es la que habla todo el tiempo. "Discutimos sobre todo acerca de la elección de compositores fuera del repertorio clásico", remata. Y Marielle añade: "Defender las propias ideas estimula la imaginación".."Somos conscientes de que la imagen de dos hermanas es muy fuerte en el escenario. Mucha gente nos recuerda porque somos un dúo", continua Katia. "Hace 20 años, cuando empezarnos las giras, no había dúos; la fórmula musical resultó muy atractiva para el público. Por otra parte posibilita muchos más estilos en el repertorio; se pueden trabajar con muchos más nuevos sonidos y dinámicas".

Katia fue la primera que empezó. "Tenía tres años y a los siete di mi primer concierto", recuerda. "Marielle vino a. verme y le gustó también. A los 15 y 17 ya dábamos recitales juntas". Ambas comenzaron a tocar el piano con su madre Ada Cecchi, antigua alumna de Marguerite Long. "Nos criamos en la frontera vasco-francesa. Nuestra madre era italiana, profesora de música y con ella empezamos a aprender piano. Pasábamos mucho a España, país que nos encanta. Podríamos decir que la música española acunó nuestra infancia". Grandes apasionadas de la música española, dicen deber mucho a Alicia de la Rocha. "Alicia nos ha enseñado enormemente, sobre todo a buscar repertorio poco tocado para piano de compositores españoles. Es una lástima que se interprete tan poco la música de compositores españoles en el extranjero", dicen. "Además", añade Katia, "soy una apasionada del flamenco y con ella me di cuenta que lo más profundo del mismo proviene y reside en Falla y Albéníz".

Precisamente serán obras de ambos compositores españoles junto con Mozart y piezas de jazz las que compongan su programa del concierto en Madrid que tocarán a dos pianos con Gonzalo Rubalcaba. "Creo que los pianistas en la actualidad son bastante conservadores en sus programas" afirma Katia. "Necesito tocar la música de compositores vivos e interpretarla con ellos. Creo que es primordial tocar música del tiempo en que se vive. Gonzalo tiene una visión muy original. Mezcla la música escrita y la improvisación. La genialidad de los Gershwin fue servir de unión entre la música popular y la clásica; hoy pocos compositores lo hacen, pues hay que conocer ambos mundos. Con Marielle trabajo más los clásicos".

Conocidas por su curiosidad y osadía, así como por sus excursiones fuera del clásico su, repertorio abarca Bach, Mozart, Schubert, Stravinski, Gershwin, Bernstein y la vanguardia del siglo XX. El próximo mes de marzo acturán junto a Plácido Domingo, cuando el tenor asuma la dírección de la Opera de Washington.