PENALTI INAUDITO
El tiqui-taca. Como lo llama Clemente. Es el quiz de la cuestión. Es el juego que le gusta a Valdano. Toque, toque y toque. Un juego académico y bien construido, basado en una teoría simple. La jugada aparece sola, no hay que precipitarse. ¿Y si no aparece? Pues se sigue tocando y esperando. Un fútbol que se hace premioso a ojos del aficionado madridista, cuyo gusto fue sieiytpre el de un juego más rápido y agresivo.'> Defensa.adelantada. Fue el recurso de la Real. El Madrid se vio durante mucho tiempo frenado, sin posibilidad de llegada, . porque Sandro no acertaba con el pase bien sincronizado y dirigido para romper esa línea, y Redondo nunca mira tan lejos. Sólo Raúl y' Sanchis acertaron en este aspecto. Raúl, una vez más, se las apañó para estar al prilicipio y al final de la jugada, para hacer de Laudrup y de Zamorano.
> La quiebra. La quiebra de la defensa adelantadaes que se coloca el resultado en manos del trío arbitral. Y en esa eterna teoría a la Real le tocó perder en el primer gol, que cambió el partido.
> Idiakez. Se suma a la colección de interesantes novedades que lanza la Real en los últimos años. Con su presencia, los donostiarras tuvieron un punto de apoyo en etataque del que habían carecido.antes.
> Abandono prematuro. Con el 2-0 el Madrid se ausentó de la lucha demasiado pronto. Parece como si los jugadores interpretaran que cuando' Valdano hace cambios para dar descanso a algunos a los demás también les toca descansar. No es la prim, era-vez que pasa. Y por culpa de eso le tuvo que salvar del pinchazo un penalti inaudito.
> Marín. Se surriaaJa larga colección de árbitros satanizados por la. afición realista en sus choques con el Madrid. Yse suma con todos los honores.
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