'Rafa' y 'Roberto' dan plantón a la comisión alemana que investiga el tráfico de plutonio
La incomparecencia ante la comisión investigadora del escándalo del plutonio del Parlamento Federal alemán (Bundestag), reunida ayer en Bonn, de los colaboradores del espionaje alemán (BND) residentes en España, el guardia civil en la reserva Rafael Ferreras y el preso en la cárcel de Málaga conocido como Roberto, así como la negativa a declarar del agente de plantilla del BND llamado Adrian, pone en peligro el esclarecimiento de los hechos. Rafa, Roberto y Adrian actuaron al servicio. del espionaje alemán como cebos de los vendedores del plutonio.Al mismo tiempo, en la sesión a puerta cerrada de la comisión investigadora, los diputados de la coalición gubernamental -democristianos (CDU-CSU) y liberales (FDP)- y los de la oposición socialdemócrata (SPD), rechazaron la moción del representante de Los Verdes, Manfred Such, de solicitar a España las citas de unas presuntas escuchas realizadas por el Cesid -servicio de espionaje español- en la Embajada de Alemania en Madrid.
El ex guardia civil Ferreras, conocido, como Rafa, fue ayer la estrella en la comisión del Bundestag, pero brilló por su ausencia. De nada sirvió la oferta de salvo conducto, la garantía de que Rafa no sería detenido por la investigación pendiente por presunta declaración falsa ante el tribunal de Múnich que condenó a (los españoles y un colombiano por introducir el plutonio en Alemania.
No ha tenido mejor suerte la comisión con el alemán Roberto, preso en Málaga por un presunto delito de narcotráfico. El juzgado de Torremolinos no autorizó la presencia de Roberto en Bonn por considerar que eso entorpecería su proceso en España. Resulta curioso que lo entorpezca ahora y no así en mayo, cuando se le autorizó para declarar en el juicio de Munich. Varios diputados expresaron ayer su incomprensión con la decisión de la justicia malagueña.
Para completar la desastrosa jornada, el testigo que compareció, el llamado Adrián en la jerga del espionaje alemán, se negó a declarar ante la comisión al acogerse a las disposiciones del código de procedimiento alemán. La ley permite a los procesados por otros delitos no declarar si de ello se pueden derivar perjuicios para él.
Acompañado de su abogado, Adrian, el intérprete durante, la venta del plutonio, en realidad agente de plantilla del BND, optó por el viejo principio de que "en boca cerrada no entran moscas".
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