Los presupuestos de Ruiz-Gallardón dejan a medias la ampliación del metro

La ampliación del metro prometida por Alberto Ruiz-Gallardón -48 kilómetros en ocho años- se tambalea. El primer anteproyecto de presupuestos del Partido Popular, que gobierna la Comunidad de Madrid desde el pasado mes de julio, recoge una inversión de 12.043 millones de pesetas (la mitad, financiada por el Estado) para las obras del nuevo suburbano. Con ese, dinero sólo se pueden hacer tres kilómetros, a razón de 4.000 millones de pesetas cada 1.000 metros de subterráneo, según los cálculos de los técnicos.Las cuentas no salen: Ruiz-Gallardón prometió seis kilómetros al año. Su consejero de Obras Públicas y Transportes, Luis Eduardo Cortés, admite las dificultades: "La realidad es dura. Con 12.000 millones de pesetas no hago el metro ni de lejos", dice. Pero no se resigna y quiere cumplir a toda costa la promesa que hizo su jefe al electorado. "Hay que buscar vías de financiación donde sea. Estamos pensando en utilizar alguna empresa pública existente o crear una nueva para conseguir los fondos necesarios", anuncia Cortés.

Las cuentas regionales que ha elaborado su compañero el consejero de Hacienda, Antonio Beteta, establecen un endeudamiento de 61.000 millones, 13.000 millones más que este año. Estos fondos extraordinarios no permiten atender las necesidades del nuevo metro. Las empresas públicas, como la que ahora propone el Partido Popular para hacer el suburbano, pueden acudir por su cuenta a los bancos para conseguir más dinero y llevar el trazado subterráneo hasta algunos barrios de la periferia.

Las prioridades establecidas en la memoria presupuestaria para 1996 son las siguientes: variante de la línea 10 entre Lago y Plaza de España, prolongación de la línea 8 entre Nuevos Ministerios y Alonso Martínez, prolongación de las líneas 4 y 8 en el distrito de Hortaleza, prolongación de la línea 9 desde Pavones a Vicálvaro y prolongación de la línea 7 desde Avenida de América a los barrios de Valdezarza y Peña Grande.

Para cumplir los compromisos anuales -seis kilómetros de nuevos recorridos-, los dirigentes del Partido Popular deberían acercar otros 12.000 millones de pesetas al cajón de las inversiones.

Ruiz-Gallardón gobernará con 557.290 millones. El primer Gobierno regional del Partido Popular ha tirado la casa por la ventana para poder hacer cosas en 1996. De los 557.290 millones de pesetas que el presidente, Alberto Ruiz-Gallardón, se ha reservado para gobernar ese año, 61.212 millones (más de un 11 %) no los tiene. Están en los bancos y a ellos acudirá el dirigente público para endeudar -verbo repudiado en el manual político del PP- al Gobierno de la Comunidad de Madrid. La deuda seguirá creciendo (a largo plazo hoy ya debe a la región más de 300.000 millones de pesetas).

De cada 100 pesetas que Alberto Ruiz-Gallardón gastará el año próximo, 22 corresponden a salarios (121.609 millones en total para los más de 30.000 trabajadores de la Comunidad); otras 10 pesetas se irán a las cajas de los bancos (para devolver préstamos hay presupuestados 57.769 millones). El 29% del gasto total permitirá hacer obras nuevas entre inversiones reales (88.134 millones) y transferencias de capital (73.857 millones). Otro 37% se reserva para gastos corrientes y permitirá que todos los servicios que presta la Administración regional funcionen (hospitales, residencias, escuelas infantiles, bibliotecas, centros de cultura...).

El reparto por consejerías queda, según el anteproyecto de presupuestos que esta semana discute el Consejo de Gobierno, como sigue:

Obras Públicas y Transportes. Con un total de 147.512 millones, será el departamento más rico de la Comunidad. Lo dirige, Luis Eduardo Cortés. Su tarea consiste en construir viviendas, promover nuevos barrios para que promotoras y cooperativas levanten sus pisos, reparar, y hacer nuevas carreteras y conseguir más kilómetros de metro.

Para ayudar a los que compren vivienda, la rehabiliten o las construyan para destinarlas al alquiler se han reservado, 9.100 millones. El Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima) contará con 33.869 millones para poner ladrillos y comprar suelo; su principal trabajo será terminar la construcción de casas para familias con escasos recursos en el barrio de Tetuán.

En construcción y conservación de carreteras se invertirán 11.235 millones. Las obras principales previstas son: la nueva vía entre la A-1 y Cobeña, y la nueva variante entre la antigua N-2 y la M-100.

Sanidad y Servicios Sociales. Rosa Posada, consejera, tendrá el segundo presupuesto más grande (142.875 millones) del Gobierno de Madrid. Como regalo del Estado recibirá el 1 de enero de 1996 nuevas responsabilidades con dinero (11.346 millones) para gestionarlas. La Comunidad tendrá así siete residencias de ancianos, 31 hogares de la tercera edad, cuatro centros de residencia de minusválidos y nueve centros-base de minusválidos que hasta ahora dependían del Estado.

Las cuentas de Sanidad garantizan el mantenimiento de los servicios actuales. Las únicas novedades consisten en la apertura de una comunidad terapéutica con 35 plazas, la puesta en funcionamiento de las residencias de ancianos en Villaverde y Móstoles, un hogar de la tercera edad en Torrejón de Ardoz y un centro de atención u minusválidos psíquicos en Fuenlabrada. El servicio de urgencias regionales prometido por Ruiz-Gallardón arrancará con unos escasos 35 millones de pesetas, el servicio de ambulancias municipales de Madrid le cuesta al Ayuntamiento más de 1.000 millones entre medios y personal.

Presidencia. La consejería de Jesús Pedroche, el ministro más joven del Gobierno regional, tiene tan pocas competencias como presupuesto (8.664 millones). La principal novedad que ofrece para el año próximo es el funcionamiento durante las 24 horas del día de una línea telefónica 900 para información al público. La extinción de incendios, competencia de esta consejería, contará en 1996 con la entrada en funcionamiento de los parques de El Escorial y San Martín de Valdeiglesias. Respecto a la prometida ampliación de partida, se recoge en el anteproyecto de presupuestos, pero no se concreta cuántas nuevas plazas de bombero saldrán a concurso

Educación y Cultura. El ex rector Gustavo Villapalos pasará de gestionar una universidad a mandar sobre las cinco que tiene la Comunidad de Madrid. Administrará 68.000 millones que vienen del Estado y otros 12.000 propios de la Comunidad sólo para universidades. En 1996, las arcas regionales trasladarán a la tesorería de las universidades 950 millones para compensar la pérdida de ingresos producida por la rebaja de las tasas a las familias de tres o más hijos. En total, el departamento de Educación y Cultura que gestiona Villapalos gastará el próximo ejercicio 117.980 millones.

Las inversiones, más destacadas serán: terminación de cuatro escuelas infantiles, construcción de dos nuevas e inicio de cuatro más; comienzo de las obras del hipermercado cultural en la antigua fábrica de cervezas El Águila; rehabilitación de los cuarteles de Leganés para la Universidad Carlos III y construcción del nuevo centro universitario de Móstoles; finalización de la biblioteca de Fuencarral, comienzo de las obras de la biblioteca de Villaverde y redacción de los proyectos arquitectónicos para Usera y Tetuán; rehabilitación del teatro Cervantes y ampliación del museo en la casa natal de Cervantes en Alcalá de Henares.

Por último, con dinero de la Consejería de Educación y Cultura se restaurarán en 1996, entre otras, las siguientes iglesias: San Andrés, Nuestra Señora del Castillo(Camporreal), sacramental de San Isidro y San Pedro el Viejo.

Medio Ambiente. Carlos Mayor Oreja, titular de la Consejería de Medio Ambiente y Desarrollo Regional, se ha guardado 5.107 millones de pesetas para luchar contra los incendios en los montes y mejorar los recursos naturales de la región. Otros 2.764 millones para tratar la basura que generan los 176 municipios madrileños. Y para construir nuevos equipamientos en 178 pueblos (Madrid queda fuera) ha presupuestado 8.700 millones de pesetas.