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Entrevista:

"Una peseta es un recuerdo"

En espera del Nobel y de un anonimato sabroso y erótico que da la gloria, este señor se ha revestido de Premio Planeta 1995 con La mirada del otro.Pregunta. No volveré a citar a los politicastros que mandan puedan hacerlo: ¿aplaude?

Respuesta. Fervorosamente.

P. ¿Qué es la Biblia en verso?

R. Una manera de dificultar la mejor prosa.

P. ¿Cuál es la pega mayor de los Diez Mandamientos?

R. El sexto.

P. Rociíto busca trabajo para casar con un número de la Benemérita. ¿Qué busca usted tras el Planeta?

R. Menos trabajo.

P. ¿Se podría reemplazar el Estado de derecho por la madre que nos parió a cada cual?

R. La que nos parió también necesita fondos reservados.

P. Se dice ahora que Hitler murió de infarto cuando lidiaba a su amante Eva Braun:

R. Dudo de su capacidad erótica.

P. Por favor, escuche a Joyce en Ulises: "Es curioso de qué modo estos periodistas dan un viraje en cuanto se encuentran en una nueva oportunidad".

R. El periodismo de Joyce no envejece.

P. Siga escuchándolo: "Vida de la vida, tus labios inflaman".

R. Hermosísima exaltación del origen.

P. ¿Vivió su infancia?

R. Sí, muy feliz.

P. ¿Cuántas veces orina a diario?

R. Bebo agua y la devuelvo.

P. Si Carolina de Mónaco le propusiera casorio, ¿se pegaría un tiro metafórico?

R. Seguramente, sí.

P. Periodista de TVE-1 el fin de semana: ¿adónde llega su capacidad de autocensura?

R. Hasta el sentido común.

P. ¿A qué libertad sirve hoy el periodismo?

R. A la que con frecuencia barre para casa.

P. ¿Es más seria la belleza o la mentira oportuna?

R. La mentira oportuna es belleza.

P. ¿Con qué palabras le felicitó el director de su banco?

R. No las he visto aún.

P. ¿Qué diferencia a la Mafia italiana de la canaria en Madrid?

R. Que la italiana es mafia.

P. Su paisano y amigo, "innombrable", que diría Beckett el Nobel, ¿cómo se llama?

R. La Ardilla Inquieta.

P. En pocos años ha cambiado brutalmente: ¿qué es?

R. Más yo.

P. ¿Diga algo de ese "yo"?

R. Má libre.

P. El surrealismo transitó por Canarias, ¿le hizo mella?

R. Soy canario, luego surrealista.

P. Demuéstrelo, por favor.

R. Hablo, a veces, como si soñara.

P. El otro día, en el Planeta, descubrí que es muy pudoroso: ¿demuéstrelo también?

R. Sólo me desnudo en la playa.

P. ¿Demuestra que es patriota?

R. No, por Dios.

P. Su novela la presentó con el nombre La necesidad del espia. ¿Contrataría a un espía?

R. Sí, para saber de mí.

P. Su novela, ahora, se titula La mirada del otro: ¿qué ve con los ojos cerrados?

R. Imagino la muerte.

P. El seudónimo de su novela era Pedro Gaspar. ¿De niño besaba a hombres o a mujeres?

R. A ambos.

P. Dígame "lo amo" en otro idioma.

R. Ti amo.

P. Diga que ama a alguien, pero en silencio.

R. Sí.

P. ¿Su popularidad televisiva coarta su libertad en la calle?

R. Sí, "la mirada del otro...".

P. ¿Tiene ayuda de cámara para ligar en su nombre?

R. Seducir es trabajo intransferible.

P. ¿Quién goza más siendo reconocido en un restaurante: Cela, Umbral o usted?

R. Yo, desde luego, no.

P. Los críticos de los premios literarios, ¿son seres vivos?

R. Vivísimos, a veces.

P. ¿Qué es una peseta?

R., Un recuerdo.

P. Una bella mujer, apenas mayor de edad, me dijo: "Me has enseñado a mirar más allá de las hojas". ¿Qué le digo?

R. "Me siento Dios".

P. ¿Dónde le plantaría una estatua a José Manuel Lara?

R. Donde no caguen las palomas.

P. Quien inventó los chalets adosados, ¿qué inventó?

R. Un lujito.

P. Sueñe en voz alta.

R. Paz.

P. Despierte, por favor.

R. ¡Que devuelvan el dinero!

P. Un anuncio de hoy dice: "Compro plata, oro, rolex... ". ¿es más erótico que su novela?

R. Prefiero las casas de empeño.

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