_
_
_
_
LA GUERRA DE VALDEMINGOMEZ

¿Produce cáncer quemar basura en un horno?

L. O. / J. M. R. Los que hacen la guerra a la incineradora de Valdemingómez -ecologistas, IU, PSOE y un pueblo entero de 20.000 vecinos, Rivas Vaciamadrid, junto al que se instala la planta- denuncian que las dIoxinas que escupirá la chimenea del ingenio "provocarán cáncer".

Los científicos dudan. Discuten desde hace años sobre las consecuencias de inhalar o ingerir esas dioxinas (compuestos altamente tóxicos que contienen cloro), sin alcanzar la conclusión definitiva.

Los defensores de la incineración citan la declaración del doctor William Farland (de la agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, EPA) en las Jornadas sobre las Dioxinas y la Incineración celebradas en Madrid en enero bajo los auspicios del Club Español de los Residuos y el Ayuntamiento de Madrid. "No se ha demostrado todavía que la dioxina sea un agente carcinógeno en el ser humano", respondió Farland a la pregunta sobre cuántas muertes se les podía atribuir con certeza. Pero el propio Farland, reconoció: "Hay una probabilidad de que [las dioxinas] sean carcinógenas para poblaciones humanas y esa posibilidad se basa en la inequívoca carcinogeneidad demostrada con animales y los datos epidemiológicos de que disponemos para seres humanos ". Un estudio de la EPA de junio de 1994, aún en fase de alegaciones, apuntaba los efectos cancerígenos de las dioxinas.

Más información
"Atufado, tres veces sin jugar"

Más tóxico que el cianuro

Greenpeace asegura que las jornadas de Madrid se hicieron "para promover el negocio de la incineración". Los organizadores, según los ecologistas, "se negaron a que participaran toxicólogos de reconocido prestigio internacional". Greenpeace mantiene que las dioxinas son las sustancias más tóxicas que se conocen y afirma que su nivel de toxicidad es 70.000 veces mayor que el del cianuro. Los ecologistas, las conocen "el veneno de Seveso". Esa ciudad italiana sufrió en 1976 una fuga de dioxinas en una fábrica de cosméticos. Las malformaciones congénitas, los abortos y los casos de cáncer aumentaron por el escape, según Aedenat.

Un informe de la Unión Europea, de 1992 señala: "El único efecto probado de las dioxinas en el ser humano es la enfermedad de la piel conocida como cloracné. Otro peligro posible es el cáncer de hígado, ya que se han realizado 17 pruebas a largo plazo en ratas y ratones y todas dieron positivo". La discusión se centra ahora en la cantidad mínima necesaria para entrar en la zona de peligro. Algunos defienden que el límite máximo permitido no debe superar los 0,1 nanogramos.

El concejal de Medio Ambiente de Madrid, Adriano García Loygorri (PP), asegura que cumplirá ese límite. García Loygorri no emulará aquella gesta de Manuel Fraga (a la sazón, ministro de Turismo), quien decidió bañarse en Palomares en 1966 para demostrar que no había nada que temer de las bombas nucleares que se le cayeron a un avión estadounidense frente a la costa andaluza. García Loygorri no se mudará a Rivas-Vaciamadrid, junto a la incineradora, para demostrar que la combustión de basura no perjudica a su salud. "No tendría inconveniente en hacerlo, pero prefiero mi casa en la Avenida del General Perón", arguye.

El edil asegura que los gases que salgan de la incineradora de Valdemingómez serán inofensivos. Pero el gobierno de Rivas Vaciamadrid, de IU, opina lo contrario.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_