Las privatizaciones del Gobierno regional deI PP sumarán 10.000 millones en dos años

El primer presupuesto del Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón da sus primeros pasos. Su hombre de los números, el consejero de Hacienda, Antonio Beteta, ordenó ayer sus instrucciones para esa ley básica y abusó de la cautela con los datos al adelantar sólo a los periodistas que intentará cuadrar, en los próximos dos meses, todas las necesidades prioritarias que le demanden el resto de los consejeros con los ingresos previstos por la Comunidad. El mayor capítulo de ingresos atípicos procederá de la privatización de una serie, aún confusa, de empresas y organismos públicos que se regulará por una ley especial. En cualquier caso, esos 10.000 millones que se piensan obtener directamente con las privatizaciones se repartirán, a efectos contables, en dos ejercicios. Las empresas públicas a suprimir permitirán, además, ahorros extras por cuantificar con la desaparición de sus gastos ordinarios.El primer presupuesto de Ruiz-Gallardón partirá de cero y teóricamente sin aceptar los compromisos adquiridos por el anterior ejecutivo socialista. Pero el nuevo consejero de Hacienda es consciente, como mínimo, de que el capítulo de personal permite pocas originalidades y de que hay proyectos e inversiones arrastradas de varios años que tendrá que cubrir.

Beteta sólo se atrevió ayer a avanzar sobre la cuantía final del presupuesto que se registrará en la Asamblea el 1 de noviembre, que alcanzará una cantidad "muy semejante en términos homogéneos", y sin lo que proceda de las nuevas transferencias de educación y el Inserso, a la del presupuesto actual (unos 520.000 millones).

Beteta apuntó que el primer objetivo del presupuesto Serán las inversiones que creen empleo. Los nuevos ingresos que se pretenden deberán llegar de un gestión más austera de los gastos corrientes y burocráticos, de una reducción drástica de las subvenciones, de una persecución más implacable del cobro de los impuestos propios como transmisiones patrimoniales y donaciones -hasta noviembre dependientes de la Agencia Tributaria estatal- y de las citadas privatizaciones.

La subvención autonómica a Telemadrid se mantendrá sobre los 10.000 millones, pero con otro método. Se aumentará a 5.000 millones los contratos por programas, ahora en 2.000.

Beteta presumió ayer de sus modernas e informáticas técnicas presupuestarias, perfectamente codificadas y con su posible financiación, en contraposición a las del anterior ejecutivo. Según Beteta, los socialistas no priorizaban inversiones y empezaban las cuentas por los gastos.