La Fuerza de Reacción Rápida dispara por primera vez con cañones pesados

Sarajevo, la capital bosnia, sufrió ayer una jornada sangrienta bajo renovados ataques de los serbios que asedian la ciudad, y que causaron al menos 7 muertos y 33 heridos. Mientras, un cañón de 155 milímetros de la Fuerza de Reacción Rápida (FRR) abrió fuego anoche contra una posición de la artillería serbia al noroeste de la ciudad para responder a una acción contra un puesto de la ONU. Es la primera vez que los cañones pesados de la FRR entran en acción.

Seis obuses fueron lanzados con cañones franceses contra una batería de morteros serbios, informó un portavoz militar de la ONU. Los cañones de 155 milímetros representan el dispositivo más potente de la artillería de la brigada multinacional de la FRR, integrada por legionarios franceses y soldados británicos, que se halla desplegada desde julio en el monte Igman.Las fuerzas serbias, con proyectiles de mortero de 120 milímetros, habían atacado por la mañana contra un puesto de observación bajo control de cascos azules egipcios, seis de los cuales resultaron heridos, dos de ellos de gravedad. A media tarde, un obús cayó de nuevo en las proximidades de ese puesto, provocando grandes daños aunque no víctimas. Tres horas después, la Fuerza de Protección de la ONU (Unprofor) una vez determinado el origen del ataque, pidió a la FRR que interviniera, lo que constituye su primera acción de envergadura en Bosnia.

La respuesta llegó tras una intensa jornada de duelo artillero en Sarajevo entre las fuerzas serbias y el Ejército regular bosnio, de mayoría musulmana, que causó al menos 7 muertos y 33 heridos. Los serbios de Bosnia han matado hasta la fecha a unos 10.500 habitantes de Sarajevo y herido a otros 50.000 en los 40 meses de asedio que sufre la ciudad.

Uno de los proyectiles que cayó sobre Sarajevo destruyó un edificio industrial en la parte oeste de la capital y provocó un incendio en un bloque de apartamentos, que finalmente se derrumbó. Al menos una persona quedó enterrada entre los escombros.

Los serbios empezaron a bombardear la ciudad y la artillería bosnia respondió con fuego contra Vogosda, barrio bajo control serbio, al noroeste de Sarajevo.

Llegan convoyes humanitarios

A la capital bosnia han empezado a llegar convoyes humanitarios con alimentos después de casi dos semanas sin poder entrar. Ayer, una caravana con 24 toneladas de legumbres, leche en polvo, harina y medicamentos salió de Terrassa (Barcelona) con dirección al puerto croata de Ploce, donde se encuentra el centro de distribución de Naciones Unidas.

El diario Oslobodenje informó que tras la salida de los cascos azules de Gorazde, las fuerzas de paz de la ONU para la antigua Yugoslavia estudian la retirada del enclave de Bihac, que podría, hacerse efectiva el próximo mes de octubre.

Mientras, dos helicópteros británicos de la FRR recibieron varios disparos cuando sobrevolaban Ploce, donde tiene su base la 24ª Brigada Aeromóvil, que cuenta con unos 4.000 hombres. Es la primera vez que se produce un acto deliberadamente hostil contra la FRR en territorio croata. Los vuelos han sido suspendidos en esta zona hasta que se conozcan los resultados de la investigación abierta para determinar el origen del ataque. El incidente se ha producido después de la muerte de cuatro soldados británicos el pasado domingo, cuando su helicóptero cayo en el mar Adriático por causas desconocidas.

En Zagreb, la capital croata, un portavoz militar indicó que el Gobierno está investigando el incidente, pero no hizo ninguna indicación sobre el origen de los disparos. Según fuentes de la ONU, los disparos contra los helicópteros podrían proceder de algún francotirador aislado.

El Grupo de Contacto (Estados Unidos, Rusia, Francia, Reino Unido y Alemania) más representantes de España, Canadá e Italia, se reunirán hoy en Washington tras asistir a las exequias de los tres diplomáticos norteamericanos muertos el pasado sábado en una carretera cerca de Sarajevo cuando el blindado en el que viajaban cayó en un barranco, según informó anoche, el Departamento de Estado.

Mientras, el jefe de Unprofor en Bosnia, Antonio Pedauyé, pidió ayer al líder serbobosnio, Radovan Karadzic, que permita a las organizaciones internacionales el acceso a Srebrenica, donde hay sospechas de que los serbios han cometido graves violaciones de los derechos humanos. Karadzic respondió que estudiará la petición.