Las elecciones en Littleborough, prueba de fuego para los conservadores británicos

El Partido Conservador británico se enfrentaba anoche a la primera prueba de fuego electoral tras la reelección de John Major como líder tory a primeros de julio. La elección del nuevo diputado por la circunscripción de Littleborough y SaddIeworth,, en la Inglaterra central, dará la medida real del grado de recuperación que han. experimentado los conservadores tras la votación que reinstaló a Major en el número 10 de Downing Street. Sin embargo y pese al optimismo de las primeras encuestas, el muestreo a nivel nacional publicado ayer por The Times sitúa al Partido Laborista en cabeza, con el 59% de los votos, 33 puntos por encima de los conservadores.Pero en la circunscripción de Littleborough y SaddIeworth, todos los sondeos apuntaban anoche a que sería el candidato del Partido Liberal Demócrata, Chris Davies, el elegido. Hasta ahora un feudo tory, las perspectivas son realmente malas para éstos. Los convocados a las, urnas para elegir al que será su nuevo representante en el Parlamento de Westminster, tras la muerte del diputado conserva dor Geoffrey Dickens, parecen decididos a cambiar de partido.

Puestos en disputa

El sillón de Dickens, que consiguió en las pasadas elecciones generales una mayoría de casi 4.500 votos, pasará, si nada excepcional ocurre, a las filas liberal demócratas. Sin embargo, la verdadera dimensión de la, consulta electoral la dará el resultado que obtengan los tories. Un segundo puesto sería considerado como un éxito total. Es, al mismo tiempo, la más improbable de las posiciones, ya que el Partido Laborista ha desplegado de manera apabullante sus fuerzas a lo largo de la campaña electoral, una de las más duras que se han visto en los últimos tiempos en el Reino Unido.Phil Woolas, candidato laborista, ha utilizado todas las armas a su alcance para "destruir" la reputación del liberal demócrata Chris Davies, recordándole pasadas declaraciones en torno a las drogas blandas y los impuestos, escasamente compatibles con la filosofía de la clase media británica. Más de 200 diputados laboristas han visitado la circunscripción a lo largo de la campaña en la que el partido de Tony Blair ha utilizado no menos de 2.000 activistas.

Obtener el segundo puesto en Littleborough era el objetivo de los nuevos laboristas en su carrera de fondo por la conquista del poder en las elecciones generales de 1997. El propio Tony Blair ha visitado la zona para apoyar a su candidato y dar la medida de la importancia que los laboristas otorgan a esta elección parcial.

Frente a tanto despliegue de medios y de entusiasmo, el Partido Conservador ha desarrollado una campaña de bajo perfil con un candidato, John Hudson, no precisamente seguro de su victoria. A última hora de ayer, los tories parecían cada vez más resignados al tercer puesto.