Siete personas sufrieron agresiones a manos e cabezas rapadas el sábado, según el Samur

Siete agresiones más. Los rapados volvieron a atemorizar y herir a los madrileños durante al noche del sábado, según informaron fuentes del Samur. Entre la medianoche y las siete de la mañana del domingo, los cabezas rapadas sembraron el pánico, una vez más, en los barrios de Argüelles y Malasaña.Las siete víctimas de las bandas neonazis tuvieron que ser atendidas de contusiones y golpes leves por el servicio sanitario de urgencia municipal. Cinco de los heridos necesitaron además asistencia hospitalaria: tres de ellos fueron trasladados al hospital Clínico, uno al hospital Gregorio Marañón y el otro al centro sanitario Doce de Octubre.

Una de las agresiones ocurrió sobre la una de la madrugada. Frente al número 20 de la calle de Ruiz (distrito de Centro), un hombre, de 25 años, yacía en el suelo, según informó la Policía Municipal.

No identificó

Había sido golpeado con una piedra y presentaba una herida leve. Por los alrededores merodeaban cinco cabezas rapadas. Lucían atuendos y distintivos propios de la ideología nazi que anima las actuaciones de estos grupos. Dos de ellos iban armados con navajas, según el Samur.

La víctima, según la versión de la Policía Local, no identificó a ese grupo ni a ninguno de sus miembros como autor de la agresión. De ese modo, la Policía Local no tuvo motivos para conducir a comisaría a ninguno de ellos, según explicó un portavoz. Mientras se le curaba una brecha en la frente al herido, los rapados se marcharon.

Ésa fue la única agresión a manos de grupos neonazis de la que tuvo constancia ayer la Policía Local. En el resto de los casos, o bien no intervinieron los agentes municipales o bien la información no había sido transmitida.

Estos grupos de violentos actúan preferentemente los fines de semana y tienen especial querencia por los barrios de Argüelles y toda la zona Centro.

El viernes pasado protagonizaron una peculiar escena del sofá. En la confluencia de las calles de Fernando el Católico e Hilarión Eslava (en el barrio de Argüelles) atravesaron un tresillo en plena calzada. Los rapados -tres de ellos fueron detenidos- comenzaron a insultar, empujar y amenazar a los viandantes.

Avisada por los vecinos, la Policía Municipal acudió al lugar del incidente. También hubo insultos para los agentes. Y golpes para uno de ellos, que fue agredido cuando intentaba identificar al grupo de violentos.

El incremento de las agresiones de los grupos de cabezas rapadas ha aumentado en los últimos meses.

En lo que va de año el número de agresiones por parte de estas tribus urbanas supera el centenar. El año pasado se contabilizaron un total de 250 incidentes provocados por rapados.