Un hombre de 35 años aparece mutilado y quemado en un solar
El descampado situado junto al número 155 de la calle de Emilio Ferrari (Ciudad Lineal) fue el escenario ayer de un terrible hallazgo. Adosado a una valla y metido en una hondura, se encontraba un cuerpo envuelto en llamas. El cadáver, todavía sin identificar y correspondiente a una persona "voluminosa", tenía mutiladas las dos piernas. Ayer la policía había averiguado que se trata de un varón de unos 35 años. El cuerpo presenta varios cortes. Según el primer avance de la autopsia, el hombre falleció a causa de varios golpes violentos en el cráneo. Posteriormente le amputaron las dos piernas.Para la policía, los autores del crimen "machacaron la cabeza" de su víctima y luego la trasladaron al descampado de la calle de Emilio Ferrari para quemarle. En este solar no había restos de sangre del fallecido. PASA A LA PÁGINA 4
Otra persona muere al caer por un terraplén una mina de sepiolita en Vicálvaro
VIENE DE LA PÁGINA 1Los vecinos de la zona aseguran que no oyeron discusiones o gritos durante la madrugada. Sólo notaron que un coche arracancaba y escapaba a gran velocidad.
Una residente del barrio se topó en el camino a su trabajo con el cuerpo ardiendo acurrucado junto a la valla de un solar. "Mi madre salió de casa para trabajar y observó sorprendida un bulto ardiendo", comentó el hijo de la mujer que alertó a la policía. Era las seis de la madrugada.
Los agentes, a su vez, llamaron a los bomberos. Cuando llegaron al descampado el cadáver todavía estaba envuelto en llamas. Los bomberos sofocaron el fuego y taparon el cuerpo con una manta ignífuga.
El cadáver, de complexión fuerte, miraba hacia el cielo. "Tenía las piernas cortadas, como tronchadas, y se le veían los huesos", preciso un vecino del barrio. "Las manos estaban hacia arriba y no se distinguía si era hombre o mujer", agregó este testigo. Sin embargo, los bomberos vieron que tenía las rodillas dobladas y el brazo derecho roto. Según la Jefatura Superior de Policía, las piernas estaban seccionadas por encima de la rodilla.
La investigación policial trabaja con la hipótesis de que varios desconocidos llevaron el cadáver hasta el descampado tras haber, matado a la víctima en otro lugar lejano. Una vez en el solar, le rociaron con gasolina y le prendieron fuego. Las extremidades del cuerpo no han sido encontradas por los alrededores.
Caída mortal
Otro cadáver fue hallado ayer por la mañana en Madrid, en esta ocasión sin que aparentemente haya mediado violencia. Un hombre de unos 30 años falleció después de caerse al fondo de una mina de sepiolita, propiedad de la empresa Tolsa y ubicada en la carretera de Vicálvaro a Coslada, según informó la Jefatura Superior de Policía. Un operario de la empresa explotadora de la mina descubrió el cuerpo en un terraplén de unos 25 metros de profundidad.
Para los agentes, el hombre falleció a causa de una fractura, de cráneo. El cuerpo todavía no había sido identificado anoche.
Según la Policía, cualquier persona puede caminar entre las masas compactas y desniveles de la extensa mina ya que no esta vallada por completo. "Se trata de una explotación a cielo abierto precisó un agente. Los funcionarios aseguran que en ese entorno suelen transitar toxicómanos. Los trabajadores de la empresa Tolsa no quisieron hacer ayer ningun comentario sobre el supuesto accidente.
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