Segunda fase del Acta de Aire Limpio
La venta de derechos de contaminación de PSG&E a Merck se debe a la entrada en vigor de la segunda fase de las enmiendas del Acta de Aire Limpio de 1990. En la primera fase, que estaba previsto hasta 1995, se trató de lavar la cara a las 110 mayores fábricas estadounidenses, conocidas como las Big Dirties (Grandes Sucias), reduciendo hasta en un 60% sus emisiones de dióxido de azufre, el producto químico que más lluvia ácida produce.Para ello, se permitió comerciar con las cuotas de contaminación. Los llamados "permisos para contaminar" se podían adquirir en bolsa o directamente en empresas que hubieran los hubieran obtenido por contaminar menos.
La segunda fase, iniciada este año, implica a 800 empresas no productoras de dióxido de azufre, pero que se exceden en las cuotas de contaminantes atmosféricos.
Según Michael J. Bradley, asesor de contaminación atmosférica de Concord (Massachusetts), reducir la contaminación a una mercancia puede facilitar a los legisladores la labor. "Antes, si a una empresa le costaba reducir la emisión de contaminantes, la. estrategia era tratar de conseguir una exención. Ahora, simplemente pagan a otras".
Para reducir el volumen total de contaminación habrá que retirar -y no desprender- una de cada nueve toneladas negociadas. Algunos organismos de protección del medio ambiente ya han venido comprando permisos de contaminación para retirarlos del mercado.
Además, lo interesante es que haya empresas dispuestas a reducir sus cuotas de contaminación incentivadas por la posibilidad de venderlas, en lugar de acomodarse pensando que pueden comprar permisos para contaminar más.
Los ecologistas se quejan de que, en lo referente al dióxido de azufre, las empresas se han acomodado a comprar permisos en lugar de reducir las emisiones.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.