Alta velocidad para la televisión digital

El próximo año quedará liberalizada en Europa la televisión por satélite y con ello podrá verse en España casi un centenar más de canales de televisión digital, un sistema mucho más avanzado que el actuaL Pero lo más probable es que no sean canales españoles. Los radiodifusores coinciden en señalar el impacto, que tendrá la "revolución" digital. Entre ellos, Juan Luis Cebrián, consejero delegado de Canal +, y Javier Gimeno., consejero delegado de Antena 3 TV, participaron ayer en un debate con representantes de la Administración y expertos del sector.

Un seminario organizado en Madrid por Retevisión (el ente público que sirve las señales de las televisiones públicas y privadas) y por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo fue el marco que permitió la discusión en profundidad acerca del grado de preparación que tiene España de cara a esta revolución tecnológica.Se trata de una hueva modalidad de televisión que permitirá, entre otras cosas, multiplicar por diez la capacidad de los canales, así como una mayor calidad, interactividad, sonido estereofónico y otros nuevos servicios. Por ejemplo: el espectador de un partido de fútbol podrá escoger la toma que más le interese, entre las varias que le serán servidas.

Miguel Ángel Feito, presidente de Retevisión, sostuvo ayer que la televisión digital tardará en España dos o tres años. Para facilitar el paso al nuevo escenario, anuncio ante la secretaria de Comunicaciones, Elena Salgado, la creación de un grupo de trabajo entre la Administración, la propia Retevisión y todo el sector audiovisual (fabricantes y radiodifusores incluidos).

Javier Gimeno, consejero delegado de Antena 3 TV, se refirió a la necesidad de que la introducción del modelo digital se haga a un ritmo "razonable" para no perjudicar a algunas televisiones y pidió que la Administración: actúe como motor del cambio, "aunque al final el coste lo pagará el consumidor.

Juan Luis Cebrián, consejero delegado de Canal + y del Grupo PRISA, se centró en el terreno concreto de las oportunidades de negocio y de servicio al cliente que abre la nueva tecnología digital. "El problema de la digitalización no es esencialmente tecnológico, porque al usuario no le preocupa la forma en que llegan las señales; el problema es qué número de canales podrá absorber el mercado y quién los va a poder pagar", dijo.

Basándose en lo que ha ocurrido en Estados Unidos (donde ya existen 150 canales por satélite) y en la entrada de la telev1sión digital en Europa el próximo año -sobre todo de la mano del sistema de satélites Astra-, Cebrián advirtió del riesgo de que la nueva oferta audiovisual pueda proceder sólo del extranjero.

En contra de la posición de Gimeno, Cebrián defendió que los radiodifusores españoles actúen como motor del cambio. Y concluyó que el problema no es tanto tecnológico, como político, "porque hay leyes que no se cumplen"; económico, "porque las televisiones actuales arrastran ya unas pérdidas de 200.000 millones de pesetas"; y finalmente, también es un problema -comercial y empresarial.

En otra de las sesiones del curso, Jordi García Candau, director general de Radiotelevisión Española, había apostado, con algunas reservas, por la digitalización. Y desveló el proyecto de compresión digital llamado Magnitude, actualmente en pruebas, que permitirá a TVE emitir seis canales hacia América.