Los jueces abren diligencias contra 204 pilotos de Alitalia por su huelga salvaje
La magistratura de Roma abrió ayer diligencias contra 204 pilotos de Alitalia, que serán sometidos a un reconocimiento médico especial tras haberse declarado repentinamente enfermos durante- las últimas 48 horas, provocando uno de los mayores caos que haya conocido en su conflictiva historia la compañía de bandera italiana. Coincidiendo con estas medidas, promovidas por el Gobierno, los sindicatos autónomos de pilotos aceptaron negociar el fin de la protesta.Ayer despegaron ya más aviones de Alitalia que la víspera, cuando a consecuencia de la huelga salvaje de pilotos fueron cancelados 480 vuelos nacionales e internacionales sobre los 625 que tenía programados la compañía. La situación seguía siendo, con todo, incierta, y en los aeropuertos persistía un insoportable caos asociado a esta protesta que los pilotos iniciaron el pasado miércoles sin advertir previamente a la compañía. Los restrasos acumulados son tales que, en e1 mejor de los casos, la situación no se normalizará hasta dentro de otras 48 horas.
Existe tensión entre los pasajeros que, en muchos casos han quedado bloqueados durante ese tiempo y que se quejan, sobre todo, de que nadie les informa sobre sus, perspectivas y menos aún corre , con los gastos de hotel y alimentación. Esta situación -cuando no se trata de problemas mas graves, como el de un niño enfermo de cáncer que esperaba ayer en el aeropuerto de Roma para ser intervenido en Francia- ha llegado al límite del enfrentamiento directo verbal y Físico contra los escasos pilotos que se han dejado ver en la atestadas salas de espera.
Los pilotos replican que no, advirtieron del conflicto, porque su protesta no es una huelga. Hace pocos meses, los pilotos de Alitalia recurrieron igualmente a obtener certificados médicos, por vía de urgencias, que les examen de trabajar en atención a síntomas muy imprecisos, como insomnio, temblores de manos o simples picores, teóricamente reveladores de estrés en una profesión especialmente cuidada por el riesgo que implica para numerosas vidas humanas.
Todas estas manifestaciones que presumiblemente se prolongarán, en cualquier caso, al menos durante los fines de semana de este verano, se debe a la política iniciada por Alitalia de alquilar aviones con tripulaciones extranjeras para cubrir servicios que no puede prestar con su propia flota debido a que los pilotos rechazan los aumentos de productividad que pide la empresa.
Alitalia tiene 2.100 pilotos que vuelan anualmente sólo 550 de las 750 horas que tienen contratadas -según ellos por mala organización de la empresa- a cambio de salarios anuales que varían de los 86 millones de liras (cerca de 6 millones de pesetas) de un piloto neófito, a los 267 millones que percibe un comandante con 30 años de carrera.
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