Los serbios liberan a otro soldado de la ONU

Los serbios de Bosnia liberaron ayer a un casco azul canadiense al que habían utilizado como escudo humano después de que resultase herido en una pierna por disparos efectuados por las fuerzas del Gobierno bosnio. El soldado canadiense fue herido cerca de la localidad de Visoko, al norte de Sarajevo, donde han sido confinados la mayoría de los otros 11 soldados de esta nacionalidad que aún permenecen retenidos por los serbobosnios. El casco azul herido fue entregado a su unidad y el resto de rehenes trasladados a un puesto más seguro en la ciudad de Ilijas, bajo control serbio.Por otra parte, el presidente serbio, Slobodan Milosevic, aseguró ayer al presidente francés, Jacques Chirac, con quien mantuvo una conversación telefónica, que las tropas de Naciones Unidas aún retenidas por los serbobosnios serán liberadas muy pronto.

Mientras, en Sarajevo, dos mujeres y dos niños murieron ayer por la tarde en el barrio de Hrasnica a consecuencia de las granadas de mortero disparadas por los serbobosnios, según informó la radio bosnia. Varias personas más resultaron heridas en el mismo ataque.

Asimismo, la ayuda humanitaria que transportaba un convoy de la ONU, que tenía por destinatarios a los musulmanes del enclave de Zepa, al este de Bosnia, fue entregada ayer a la Cruz Roja serbia ante las presiones de las fuerzas serbobosnias que la tuvieron bloqueada durante tres días con la excusa de que en los camiones se transportaban también municiones. La ayuda será recibida ahora por los refugiados serbios que viven en el este de Bosnia. Desde los ataques aéreos de la OTAN del mes pasado, los serbios han impedido que llegue toda ayuda humanitaria a los enclaves musulmanes de Bosnia.

Mientras tanto, sigue el baile diplomático. El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Andréi Kózirev, se entrevistó el sábado por la noche en el balneario ruso de Sochi, en el mar Negro, con Carl Bildt, el ex primer ministro sueco y nuevo mediador de la Unión Europea para la antigua Yugoslavia.