Pozos sin control
El Ministerio de Obras Públícas, donde predomina la cultura de las aguas superficiales -hasta 1986 no asumió la gestión de las subterráneas-, ha tardado en descubrir estas fuentes como alternativa para afrontar los momentos críticos que hoy se padecen. "Se han puesto a hacer perforaciones, de repente, cuando ya les había pillado el toro", afirma un hidrólogo.La mayor parte de las inversiones públicas para afrontar la sequía se dedican ahora a, perforar acuíferos. En Andalucía, los particulares libran su propia batalla por agujerear el subsuelo al margen de cualquier control. Los expedientes sancionadores se acumulan. Las elecciones autonómicas primero y las municipales después han dejado en suspenso decisiones clave para intentar reducir el consumo.
La delegación del Gobierno ha pedido a los ayuntamientos que apliquen restricciones donde no las hay, pero ni Almería, ni Córdoba, ni Sevilla atienden la solicitud. Esperan a que se constituyan las nuevas corporaciones.
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