Ucrania endurece su postura sobre la flota del mar Negro

La cumbre de la Comunidad de Estados Indepedientes (CEI), que se abre hoy en Minsk, la capital de Bielorrusia, estará dominada por los esfuerzos para lograr una mayor integración económica y, ante todo, por las conversaciones bilaterales que se espera se celebren entre Rusia y Ucrania para tratar de resolver el problema de la flota del mar Negro. Este último país, que aplica una política cada vez más independiente de Moscú, ha endurecido su posición frente a las pretensiones de los militares rusos, según se desprende de una carta enviada por el presidente ucranio, Leonid Kuchma, al líder ruso, Borís Yeltsin.Las propuestas de Kiev para resolver el problema de la flota del mar Negro, cuya base principal se encuentra en la península de Crimea -territorio que algunas fuerzas políticas rusas reclaman para Rusia-, difícilmente podrán ser aceptadas por el Kremlin. En su carta a Yeltsin, Kuchma: propone que Sebastopol deje de ser sede exclusiva de la flota rusa. Esto significa que Ucrania no arrendaría a Rusia este puerto y que Moscú no tendría a su completa disposición ninguna localidad en Crimea. Yeltsin ha enviado la carta a sus asesores para que estudien las propuestas ucranias y den las recomendaciones que estimen pertinentes. Nadie duda de que los expertos concluirán que las propuestas de Kuchina son inaceptables para Rusia.

Si en Minsk ambos líderes no logran ponerse de acuerdo, el tratado de amistad entre Ucrania y Rusia se verá con toda probabilidad aplazado.