Parte de los servicios de Retevision pasan a una nueva sociedad anónima

Retevisión, el ente público que sirve las señales de televisión a las cadenas públicas y privadas, ha decidido crear una sociedad anónima para gestionar las actividades de telecomunicación que ya han sido liberalizadas o están a punto de serlo, como telefonía móvil, videoconferencias, radio mensajería y alquiler de circuitos.Esta decisión, que supone sentar las bases para una posterior privatización de la empresa, fue adoptada en el último consejo de administración del organismo público y elevada posteriormente al Gobierno. Fuentes de la Administración aseguran que no hay problema para el visto bueno del Consejo de Ministros en una próxima reunión.

Después de esa transformación, Retevisión quedará dividida en dos secciones operativas. Por una parte, el ente público, que mantendrá de momento el monopolio del transporte de las señales de televisión; y por la otra, la nueva sociedad anónima, para la que se ha pensado el nombre de Optel, que gestionará los servicios ya liberalizados.

Inicialmente el capital de la nueva empresa estará al ciento por ciento en manos de Retevisión, pero el proyecto prevé la posibilidad de dar entrada a otros socios privados.

La facturación en los servicios que pasarán a la nueva sociedad alcanzó en 1994 la cifra de 1.647 millones de pesetas, un porcentaje todavía 'pequeño en relación con la facturación total de Retevisión de ese mismo año, que superó los 28.000 millones.

Continúa adelante, mientras tanto, el proyecto de crear en torno a Retevisión el segundo operador de telecomunicaciones, después de telefónica, para lo cual se requieren otros socios industriales y tecnológicos.