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La Comisión da de plazo hasta hoy a Canadá para entregar el 'Estai', bajo amenaza de sanciones

La Comisión Europea dio ayer un rotundo, solemne, público y unánime espaldarazo a los pescadores del Estai e insinuó que podría imponer sanciones comerciales a Canadá si a las 9.00 horas de hoy no ha dado marcha atrás en su apresamiento ilegal. "Estoy dispuesta a abrir negociaciones desde que el barco, su tripulación y su cargo hayan sido liberados, y ello desde las nueve horas de mañana [hoy para el lector]", afirmó la comisaria de Pesca, Emma Bonino, en una comparecencia pública. Mientras, el Reino Unido ha vuelto a demostrar la distancia política que le separa de la UE. El Parlamento de Westminster registró una turbulenta sesión el lunes cuando varios diputados, tories (conservadores) y laboristas, se preguntaron con preocupación si su país iba a apoyar las eventuales represalias de la UE.Tanto Bonino como el comisario de Política Comercial, Leon Brittan, insinuaron que si Canadá persiste en la detención ilegal, la UE podría imponer sanciones comerciales. Brittan afirmó que la UE "se reserva adoptar las medidas que estime oportunas" y se negó a concretar más porque se pretende "una solución pacífica". Adelantar con qué medidas se respondería "no ayudaría a los pescadores españoles", al eliminar el "factor sorpresa", arguyó. Su defensa del Estai sorprendió al sector menos prohispano de periodistas de su país. "La víctima es hoy un barco español pero mañana puede ser británico", les respondió.

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Bonino recordó que las exportaciones pesqueras de la UE a Canadá totalizan 20 millones de ecus, contra 300 millones las importaciones, por lo que "si tuvieran que ponerse en marcha medidas de retorsión, éstas no podrían limitarse únicamente a los intercambios comerciales de productos pesqueros".

Investigar las redes

El secuestro del Estai es una "violación organizada" de las leyes internacionales que no permiten la ampliación unilateral de la zona exclusiva de pesca, recordó Bonino. "Han violado los procedimientos y ello invalida" cualquier resultado de la investigación sobre las redes del barco apresado. Además, el Estai había sido inspeccionado por los canadienses (la NAFO autoriza a que cualquiera de sus Estados miembros inspeccione los barcos de sus socios) los días 2 y 20 de diciembre, "y los tamaños eran correctos". "Podían haberlo inspeccionado otra vez, pero optaron por la violencia", criticó.

"No me parece una idea fantástica" que España envíe barcos de guerra, opinó la comisaria tras insistir en la vía de la presión para que Ottawa dé marcha atrás a una acción con la cual ha tomado como rehén" a la comunidad internacional. Ni siquiera el argumento canadiense de conservación de los recursos pesqueros tiene sentido, indica la Comisión, porque Europa se había comprometido a dejar de pescar en el momento en que se hubiesen capturado las 27.000 toneladas de fletán negro acordadas para 1995.

Los canadienses, argumentan los comisarios, tratan de "esconder intereses econórnicos", cuando pretenden modificar el quién pesca, puesto que piden aumentar su cuota en un 500% (del 12% al 60%) en aguas de la NAFO. Bruselas había ofrecido a sus; socios una sustancial rebaja de su cuota, reduciéndola hasta 18,000 toneladas/año (desde las 40.000 que capturaba cuando no había convenio). Pero Canadá dictó su propia ley el 3 de marzo autoautorizándose a detener barcos en un área de 200 millas de aguas internacionales junto a su costa, contra el Derecho internacional.

Mientras, el Reino Unido ha vuelto a demostrar la distancia política, que le separa de la Unión Europea. No sólo los periódicos más conservadores, como el Sunday Telegraph, han insistido en que los británicos deben alinearse indefectiblemente con Canadá, país miembro de la Conimonwealth con el que comparten idioma y soberana.

Turbulenta sesión

En los Comunes se oyeron ácidas críticas contra las prácticas españolas y se consideró "altamente ofensivo" el lenguaje utilizado por la Comisión, que calificó la actuación de Canadá de "piratería organizada". El secretario de Estado de Pesca, Michael Jack, hizo votos porque las dos partes se sienten a negociar cuanto antes para acabar el conflicto.

El diputado laborista Peter Shore arrancó ovaciones cerradas en las filas tories cuando, tras recordar que España ha enviado ya una patrullera, se preguntó en voz alta: "¿Nos vamos a encontrar con la Armada británica apoyando a los españoles frente a Canadá?". El conservador Teddy Taylor, conocido eurorebetae, reclamó a Jack que el Gobierno se comprometa a no tomar ninguna decisión sin que antes haya sido aprobada por el Parlamento, posición que respaldó una gran mayoría y que el Gobierno británico parece dejar claro con su tibieza.

Por otra parte, y a propuesta del presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, la Comísión Institucional del Comité de las Regiones de Europa adoptó ayer en Montpellier (Francia) una moción de cinco puntos en la que se reprueba "con la mayor contundencia el apresamiento ilegal del pesqueró comunitario Estai" por el Gobierno de Canadá, según informa Enric Company. La moción obtuvo una amplia mayoría aunque no la unanimidad. Seis representantes se abstuvieron y otros seis votaron en contra. La mayoría de estos votos reacios correspondían a ciudades y regiones británicas y nórdicas. La moción apoya la decisión de las autoridades de la UE de no mantener ningún tipo de negociación con Canadá en tanto no sea liberado el pesquero. También se reclama que la flota pesquera comunitaria "reanude de inmediato las labores de pesca, ya que reúnen todas las condiciones requeridas".

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