Las asociaciones de padres advierten sobre el regreso a la desigualdad

¿Contribuirán realmente las autopistas de la información a la democratización del conocimiento? ¿Estarán al servicio de todos esas nuevas tecnologías que supuestamente ponen la información al alcance de todos?Estas preguntas han planeado sobre el congreso que, bajo el lema Los retos de la educación ante el siglo XXI, acaba de celebrar en Madrid la Confederación Española de Asociaciones de Padres de Alumnos (CEAPA) y a la que asistieron más de 400 padres de alumnos, profesores, dirigentes de Unesco y expertos en educación de America Latina.

Francisco Delgado, presidente de la CEAPA, cree que tales preguntas ponen sobre el tapete el inquietante futuro de un servicio público, el de la enseñanza, amenazado por una profundización en la tendencia al individualismo y, en el campo concreto de la educación, a su privatización.

"En el congreso", afirma Delgado, "han sido muchas las voces que han advertido que ya hoy es perfectamente comprobable cómo se profundiza la diferencia entre el alumno que goza en su casa de un clima cultural favorable, incluido el acceso a los nuevos instrumentos tecnológicos, y el que no dispone ni de una biblioteca familiar mínima. La ventaja del primero sobre el segundo en el aula puede llegar a ser insalvable, si la escuela no actúa desde una dinámica decididamente compensadora".

Las diferentes condiciones del habitat educativo familiar no son el único peligro, en opinión de Delgado, hay síntomas en el panorama actual de la enseñanza pública que resultan igualmente preocupantes. La tendencia a reducir el horario lectivo y la aparición simultánea de ofertas sustitutorias de carácter privado al alcance únicamente de las minorías sociales constituyen las principales pruebas de que todo empieza a moverse en la misma dirección: la recuperación del espacio exclusivo de una educación de calidad por parte de las minorías de siempre. Delgado alude, entre otros ejemplos, a la proliferación, en el ámbito universitario, de las ofertas privadas de masters que sitúan en ventaja ante el primer empleo sólo a quienes pueden pagarlos.

La educación suele ser, según se volvió a subrayar en el congreso de la CEAPA, la primera víctima de las crisis económicas, como se ha podido comprobar en los ejercicios presupuestarios de los últimos años, y ello incluso con administraciones más favorecedoras de los servicios públicos. "Es indudable que la tendencia al recorte será mucho más dura, como ha podido comprobarse en el Reino Unido y Estados Unidos, con administraciones privatizadoras a ultranza", precisa Delgado.

La insistencia en el peligro de la privatización es una de las conclusiones provisionales más sobresalientes del congreso, cuyas ponencias serán recogidas por CEAPA en un libro.

Los congresistas advierten que, si no se apuesta fuertemente por una política de apoyo decidido a la escuela pública, se perfila en el horizonte una cuádruple red de centros de enseñanza: la privada, la privada concertada, una red pública de élite y una red pública para las clases más desfavorecidas, en función del nivel de desarrollo de las diversas zonas geográficas y urbanas. La defensa de una enseñanza multicultural, como mecanismo de prevención contra la intolerancia hacia las minorías, es otra de las conclusiones.