40.000 litros de aceite tóxico abandonados en Arganda 'entrarán' en el Senado

VIENE DE LA PÁGINA 1La nave (en realidad, son dos unidas) ocupa una extensión de 3.000 metros cuadrados. Sus ventanas han sido cegadas recientemente con tablas de madera por el Ministerio de Trabajo, después de que el grupo municipal del PP denunciase ante, el Ayuntamiento su completo abandono y el peligro que supone que alguien acceda a su interior. Las puertas, hasta hace poco abiertas, han sido cerradas con un simple candado. Pero adyacente al destartalado almacén se levanta un antiguo puesto de vigilancia que utilizaban los guardias civiles que lo custodiaba. Y la mayor parte de sus ventanas están rotas.

Desde este abandonado puesto de la Guardia, Civil, y a través de una ventana interior, se accede fácilmente a la nave principal, donde se acumula el aceite de colza desnaturalizado. Las alarmas, a pesar de permanecer conectadas, no suenan cuando alguien se adentra en este almacén, según comprobó ayer este periódico. El concejal Ginés López lo explica: "Se dice que la alarma está conectada con un cuartel de la Guardia Civil cercano. Pero yo creo que nunca funciona. Los agentes sólo se pasan de vez en cuando por aquí".

En el interior de la nave se apilan miles de botellas, garrafas y bidones cubiertos de polvo y mugre. Muchas garrafas están volcadas y el aceite que contenían recubre ahora el suelo del almacén. Un fuerte olor oleagionoso se expande por el recinto.

Pequeños frascos

Entre las basuras destacan cientos de pequeños frascos con muestras del aceite tóxico. En sus etiquetas se lee: "Aceite decolorado", "aceite desodorizado", "aceite filtrado", "aceite neutro", "aceite depurado"...

El Ayuntamiento remitió, el pasado día 8 de febrero, una nota al ministerio para recordarle que las medidas de seguridad no son suficientes. Pidió además que los bidones fueran trasladados al depósito de seguridad de residuos tóxicos y peligrosos que la Comunidad de Madrid tiene en San Fernando de Henares.

El consistorio recuerda además que "las naves donde se encuentra almacenado el aceite tóxico no disponen de licencia municipal, licencia de difícil consecución, ya que las naves se encuentran en suelo no urbanizable especialmente protegido".

La senadora del PP Rosa Vindel comenta: "Es inaudito que tantos miles de litros de aceite tóxico se acumulen sin vigilancia en esta nave. No sabemos si desprenden gases peligrosos, si los niños pegan por allí... Es todo un sinsentido".

Desde Trabajo se replica: "El aceite almacenado no se puede destruir porque es un prueba que depende directamente de la Audiencia Nacional. El ministerio sólo es responsable del alquiler y mantenimiento del local. Los magistrados tienen la última palabra". El proceso de la colza se cerró en 1992 con la sentencia condenatoria del Supremo.