Cómo no será el 'Leguidú'

El pasado 30 de diciembre, un jurado formado por arquitectos de la Comunidad, del Ayuntamiento, del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid y de la Dirección General de Patrimonio dio a conocer los ganadores del concurso de ideas para reformar el Centro de las Artes y la Cultura de la Comunidad de Madrid, ubicado en el edificio de la antigua fábrica de cervezas El Águila.Se trataba de acondicionar 35.000. metros cuadrados de superficie para acoger aulas de danza, de teatro, una biblioteca, un auditorio, sala de exposiciones y una escuela de diseño, además de oficinas, locales comerciales y cafetería. En las bases del concurso se indicaban las partes de la antigua fábrica que se debían respetar y las que era posible demoler.

El equipo formado por Emilio Tuñón y Luis Moreno fue el señalado para ejecutar su proyecto. Según comentaban en la Comunidad de Madrid, su proyecto ha sido el que mejor unía la arquitectura existente con la nueva. Han separado las distintas construcciones para ordenar las actividades, y el espacio que queda entre ellas es lo que caracteriza su trazado. El cierre de la manzana lo aprovecharán para poner anuncios y rótulos luminosos. Pero la Comunidad considera que el trabajo presentado por los 20 finalistas fue excelente y merece ser conocido por el público en una muestra inaugurada el lunes.

Julio Cano Lasso (tercer premio). A este arquitecto se le ocurrió incorporar los restos antiguos de la fábrica a la nueva estructura envueltos en una red metálica muy tupida. Los, edificios antiguas quedan al descubierto sólo con pequeños cambios y añadidos. Hay también una pasarela, los silos circulares en gris barco de guerra y como elemento básico una torre de comunicaciones.

Javier Carvajal. Basa su propuesta en enfatizar la claridad e independencia de cada una de las actividades del centro, en la restauración cuidadosa de los edificios más emblemáticos del conjunto y en el uso masivo del ladrillo en fachadas y muros ciegos.

José Antonio Corrales. Propone mantener y potenciar el espíritu urbano del conjunto de edificios que componen la fábrica. Las nuevas construcciones se proyectan con carácter funcional, pero con imagen actual, y elige como elementos de construcción para ellos aluminio en su color y cristal.

José Antonio Martínez Lapeña y Elías Torres Tur. Apuestan por la conservación integral de los edificios de interés para mantener la imagen actual. Sólo se derriban los más recientes y los que dan a la calle de Bustamante. Las obras en los edificios protegidos son escasas y pretenden aprovechar o reutilizar los elementos estructurales originales. Las fachadas de los nuevos edificios están revestidas de planchas de acero.

Estanislao Pérez Pita y Jerónimo Junquera. Plantean un sistema sólo para peatones para penetrar en el centro y circular libremente por él; un sistema centralizado de locales de servicio, almacén y talleres con acceso diferenciado o un sistema de acceso de vehículos.

Francisco Rodríguez de Partearroyo. Plantea un espacio con características muy cinematográficas, "una especie de mini Gotham City a la madrilena". La construcción nueva más importante es una estructura de 20 metros diáfanos.

F. Javier Sáenz de Oiza. La rehabilitación y nueva construcción que presenta se asocia a la vecindad del Museo del Ferrocarril para crear un gran espacie, cultural con ambos edificios. Propone una gran calle acristalada que sirve de fondo al edificio de la maltería, al que considera de más interés arquitectónico. Agrupa los silos metálicos en una torre en la que se concentra luz y sonido.

Federico Soriano y Ricardo Sánchez Lampreave (segundo premio). Sólo conservan o restauran los espacios completos, nunca muros o detalles. Para los edificios nuevo . s respetan los mismos criterios con que se construyó la fábrica. Una cinta de cristal líquido (pantallas de información) atravesaría todo el conjunto lanzando noticias.

Exposición del concurso de ideas para el Centro de las Artes y la Cultura de la Comunidad. Sala Millares del antiguo MEAC (avenida de Juan de Herrera, s/n, metro Moncloa). Hasta el 13 de marzo. Entrada libre.