El Papa envía un cardenal a Perú y Ecuador para mediar en el conflicto entre los dos países

El cardenal italiano Carlo Furno viajará a las capitales de Perú y Ecuador como enviado especial del papa Juan Pablo II. Furno pedirá a los Gobiernos de los dos países en contienda fronteriza desde el pasado 26 de enero que respeten el alto el fuego acordado en Brasilia el día 17 y pongan en marcha la declaración de paz de Itamarati firmada en esa fecha por ambos.La misión del Vaticano se produce cuando, al iniciarse la quinta semana de conflicto, fuentes militares peruanas dan cuenta de un nuevo recrudecimiento de los combates en los 78 kilómetros de selva amazónica en disputa, y los presidentes de ambos países acentúan esfuerzos diplomáticos para lograr el reconocimiento internacional a su causa.

Tras la aparición pública de Alberto Fujimori en la zona en disputa el domingo, el presidente de Ecuador, Sixto Durán Ballén, se desplazó ayer a Uruguay para asistir a la transmisión de mando en ese país y, de paso, tratar de involucrar más al Gobierno de Montevideo en la versión de los hechos que mantiene Quito.

Durán Ballén viajó acompañado de su ministro de Asuntos Exteriores, Galo Leoro, quien tiene previsto reunirse hoy con su colega peruano, Efraín Goldemberg. Leoro y Goldemberg intentarán que se acelere la llegada a la cordillera del Cóndor de una delegación definitiva de mediadores internacionales que deberían encargarse, principalmente, del respeto mutuo al acuerdo de alto el fuego suscrito por Perú y Ecuador hace 10 días.

El enviado del Papa no actuará como "mediador" en el conflicto, según precisó ayer el portavoz del Vaticano, Joaquín Navarro Valls. Para que Carlo Furno -quien fue nuncio del Vaticano en Perú de 1973 a 1979 y, anteriormente, en Ecuador- pudiera actuar como mediador tendrían que haberlo pedido expresamente ambas partes, primero por separado y después de común acuerdo.

Furno -explicó Navarro Valls- actuará de portavoz de los sentimientos del pontífice, quien reitera su solicitud a los dos países para que depongan las armas y busquen una solución definitiva a su disputa fronteriza.