Enhorabuena,

señor Pérez Mariño, por haber tenido el coraje, que no la clarividencia, de proclamar desde su escaño lo que gran número de españoles pensamos desde hace, tiempo.Si digo que no ha sido clarividente, no me refiero a que su análisis de la situación no sea correcto, sino a que hace falta estar completamente ciego para no darse cuenta de lo que está pasando en el partido socialista y de lo que éste necesita..

Un gran sector de la población nos hemos quedado sin referencia política, no sabremos qué hacer cuando nos veamos frente a las urnas. Continuamos pensando que la filosofía socialista es adecuada para nuestro país, pero no tenemos fuerza moral para seguir votando a sus máximos representantes. Nos hemos quedado sin argumentos para votar a Felipe, quien, probablemente, continúa en el poder gracias a José María Aznar, su mejor sustento, ya que muchos preferimos que siga Felipe sólo porque no gobierne Aznar, quien haría el mejor favora su partido dejando su puesto a otro con más atractivo y. carisma, si es que lo tienen.

En una palabra, que los señores que tienen algo que decir en el partido socialista elijan entre sus filas a individuos honrados, coherentes, honestos, que quieran trabajar por la equidad y la justicia, que tengan aún ilusión y que sean capaces de devolvérnosla a nosotros. Busquen, busquen, seguro que encuentran a mucha gente. Y a Pérez Mariño, enhorabuena de nuevo; pero, por favor, que no permita que su posicionamiento, tan honesto y generoso, sea manipulado, instrumentalizado y corrompido por esa clase política que no tiene sensibilidad para respetar las cosas buenas que aún surgen en su seno-