Streisand y Close respaldan un polémico sobre lesbianismo

Dos de las mujeres con mayor presencia en la industria del cine en Estados Unidos, Barbra Streisand y Glenn Close, han colocado esta semana sus nombres en los títulos de crédito de un telefilme sobre el caso real de Margarethe Cammermeyer, la enfermera expulsada del Ejército de ese país en 1992 por declarar abiertamente que era lesbiana. Producida por ambas y protagonizada por la segunda, la cadena NBC quizá no se habría arriesgado a emitir la polémica historia sin contar con el respaldo de las dos.La programación de Sirviendo en silencio: la historia de Margarethe Cammermeyer fue, según cuentan los comentaristas televisivos de EE UU, un acto de coraje por parte de la cadena, ya que venía precedido de la polémica en torno a una escena en la que las protagonistas, Glenn Close y Judy Davis, se besan en la boca. Pero las buenas críticas alejaron el temor de que los anunciantes no colocaran sus anuncios publicitarios en medio de una, historia de amor homosexual.Un caso real

Las escenas románticas del telefilme son escasas. Sin embargo, la emisión de una historia de estas características en el horario de máxima audiencia de EE UU siempre levanta una pequeña polvareda previa, promovida por ignotos grupos reaccionarios que inevitablemente dan gran publicidad al acontecimiento.

En 1992, la coronela Cammermeyer, divorciada y con cuatro hijos, declaró a un superior en un interrogatorio rutinario que era lesbiana. Negándose a corregir, su declaración por creer que sólo estaba diciendo la verdad, ese mismo año fue expulsada del Ejército y su caso se convirtió en uno de los puntos de referencia de la polémica sobre homosexuales en las Fuerzas Armadas de EE UU. Pero en junio del año pasado Cammermeyer recurrió contra la sentencia y fue readmitida en su trabajo.