El control de pagos en los juzgados ha supuesto unos ingresos para el Tesoro de 56.000 millones desde 1989

El estrecho control a que ha sometido el Ministerio de Justicia a los órganos judiciales desde 1989 ha permitido al Tesoro ingresar unos 56.000 millones de pesetas entre ese año y finales de 1994. Estos fondos provienen de los intereses que renta la Cuenta de Consignaciones y Depósitos Judiciales abierta por Justicia en el BBV. El saldo medio de la cuenta se situaba a final de primer semestre de 1994 en 169.211 millones. La existencia de esta cuenta, que se dio poco a conocer, fue motivo de una pregunta en el Congreso por el diputado de IU Diego López Garrido.

La Cuenta de Consignaciones y Depósitos Judiciales se abrió en junio de 1989 tras el convenio firmado entre Justicia (siendo ministro Enrique Múgica) y el BBV, una vez finalizado un procedimiento público de adjudicación que ganó esta entidad financiera. El objetivo de la cuenta fue acabar con la circulación de dinero por los juzgados y evitar el despilfarro y, en muchos casos, la desaparición. La citada cuenta, que antes nunca había existido, compren de la gestión económica -abarca todas las operaciones de ingreso, depósitos y pagos- realizada por todos los tribuna les así como la mayor, parte de los 2.253 juzgados que integran la administración de Justicia. Un pequeño número de juzga dos ha permanecido al margen por estar en localidades peque ñas sin sucursales del BBV.

El convenio tiene una vigencia de cuatro años, con una cláusula que, según ha reseña do el subsecretario de Justicia, Fernando Escribano, ha permitido renovar automáticamente en 1993 por otros cuatro sin necesidad de hacer consurso. Cuando acabe el nuevo periodo, en 1997, sí habrá que convocar la adjudicación de la cuenta en concurso.

De acuerdo con el convenio firmado, los intereses generados por la cuenta se ingresan semestralmente en el Tesoro Público. El tipo de interés fijado durante el periodo 1989 1992 fue el del MIBOR (tipo de interés en el mercado interbancario -al que se prestan entre sí los bancos- de Madrid) a seis meses menos un diferencial de dos puntos. Para el periodo que está en curso, el interés fijado es el del MIBOR menos 1,45 puntos. Actualmente, el MIBOR a seis meses es del 9,55%, aunque en los años anteriores estuvo en tasas superiores.

Los ingresos financieros generados por la cuenta, en virtud de esas condiciones, se elevaban a 48.237 millones de pesetas a finales del primer semestre de 1994. En el segundo semestre de 1994, según las estimaciones iniciales, podría haber generado en torno a 8.000 millones más. Sólo en 1994, los ingresos financieros aportados al Tesoro se elevarían, por tanto, a unos 14.000 millones, según las fuentes consultadas.

Pregunta de IU

La evolución de los ingresos financieros ha sido creciente a lo largo de los semestres (véase el cuadro). La razón básica, según las fuentes consultadas, es que los juzgados se han ido incorporando paulatinamente y no tanto el hecho de que en los últimos años hayan proliferado los casos de delitos monetarios, algunos de importantes cuantías.

El autor de la interpelación al Gobierno, Diego López Garrido, se pregunta por qué la retribución por la cuenta, a la vista del saldo medio, no es más alta, lo que permitiría ingresos superiores al Estado. Según López Garrido, la adjudicación del contrato no tuvo la difusión ni la transparencia suficiente como para poder ser debatido. En ese sentido, propone que para cuando se convoque el próximo concurso (en 1997) se debatan a nivel parlamentario los criterios que se siguen y pide mayor rentabilidad para la cuenta de Estado. También se pregunta el diputado de IU por qué no, se dio directamente a la banca pública y por qué los ingresos obtenidos no revierten directamente -o al menos una gran parte- a Justicia, al que no le "vendrían nada mal".

Los ingresos van directamente, al Tesoro y se asignan, en virtud del principio de caja única, al destino que determinan los Presupuestos Generales del Estado. Se da la circunstancia de que precisamente Justicia (ahora con Interior) no es un departamento gastador.

La adjudicación del contrato al BBV creó polémica, al relacionarse con el caso Filesa (presunta financiación al PSOE, por parte del banco). Este extremo ha sido rechazado rotundamente por Justicia y por el banco. Según el BBV, los bancos seleccionados fueron los antiguos Bilbao y Vizcaya, que acabarían fusionándose.