404 jóvenes estrenan sus viviendas de protección oficial en Moratalaz

Cuatrocientos cuatro jóvenes de Moratalaz pueden leer ya sin sobresalto las páginas inmobiliarias. A través de la cooperativa de la asociación vecinal Avance, de su barrio, han estrenado unos pisos por los que pagarán de 4,5 a 9,5 millones, según tengan 5 3, 75 o 90 metros. Estas viviendas, de protección oficial, están construidas en suelos municipales de la calle de Fuente Carrantona incluidos en el Plan 18.000.

Rosa Díaz, de 25 años, recibió hace 10 días las llaves de su nuevo piso. Todavía no acaba de creerse que con el sueldo de ayudante de albañil de su marido estén comprando una vivienda nueva y de tres habitaciones en una ciudad tan cara como Madrid."Hasta ahora vivíamos en Pinto pagando 25.000 pesetas de alquiler por una casa que estaba bastante mal, y era barato, porque después las rentas de pisos similares se duplicaron", asegura esta joven madre de una niña.

"Mi suegro, que ha vivido siempre en Moratalaz, solía ir por la asociación de vecinos y allí se enteró de que se iba a formar esta cooperativa, nos lo dijo y nos animamos; me parece que todo ha salido muy bien, lo peor ha sido tener que esperar hasta que se hicieran", asegura Díaz. Ella vive en el bloque más barato, de régimen especial, al que han optado aquellos que no superan en 2,5 veces el salario mínimo interprofesional.

"No! sale por unos siete millones de pesetas", añade. En. 75 años, el suelo de su parcela y de otra de las tres construidas, cedidos en régimen de derecho de superficie, volverá a ser propiedad del Ayuntamiento. "Eso no me preocupa nada, cuando llegue ese momento ya se buscará una solución", concluye.

Lola Sánchez, una secretaria de 29 años, soltera y sin hijos, limpia con ilusión su nueva vivienda. "Supe de esta cooperativa a última hora y por azar, porque cuando salió el Plan 18.000 acudí a informarme a la Junta de Moratalaz y allí un guarda me contó que su hija estaba apuntada", explica.

El piso, un bajo que da a un luminoso patio donde jugarán los niños, tiene tres habitaciones y le va a costar algo más de ocho millones.

Los precios de este bloque y de otro situado a escasos metros son algo más caros que el de Rosa Díaz. A ellos han accedido personas y familias cuyos ingresos no superan en 5,5 veces el salario mínimo interprofesional. La nueva barriada es ya un pequeño hervidero de vecinos que acuden a limpiar sus nuevos pisos, y a realizar poco a poco la mudanza.

Prisciliano Castro, presidente de la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) y de la asociación Avance de Moratalaz, explica que la clave de obtener precios baratos está en lograr suelo cedido por el Ayuntamiento. Algo que no todas las cooperativas consiguen.