Telefónica aportara una fianza de 4.000 millones para la telefonía movil
Al igual que el consorcio ganador de la segunda licencia de telefonía móvil, Airtel, la compañía Telefónica también depositará 4.000 millones de pesetas en concepto de fianza para poder ofrecer el nuevo sistema digital paneuropeo GSM.La decisión fue anunciada ayer, aunque el ministro de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente, José Borrell, ya había anticipado esta posibilidad durante su intervención en el Congreso, la semana pasada para explicar las razones de la concesión de la licencia de la telefonía móvil.
Telefónica, sin embargo, no pagara ninguna suma por la licencia que le concedió el Estado de forma directa, como sí lo hará el consorcio Airtel. La empresa ganadora aportará 85.000 millones de pesetas por la licencia, de acuerdo con la propuesta que incluyó en su oferta.
Según explicaron fuentes de Telefónica Móviles, este extremo resulta razonable porque la empresa ya contaba con una licencia general para la explotación de la telefonía móvil.
Se trata del mismo contrato que le permitió gestionar los primeros servicios móviles y el actual sistema 900. En este caso, en realidad, lo que hará el estado es cambiar ese contrato para adaptarlo a las nuevas condiciones impuestas por la liberalización de las telecomunicaciones.
Por otra parte, representantes de la secretaría general de Comunicaciones aseguraron que se reunirán próximamente con Cometa-SRM, el consorcio de telefonía móvil que perdió el concurso para la segunda licencia, para explicar a sus directivos cuáles fueron los puntos débiles de la oferta.
Las mismas fuentes manifestaron que con este contacto se tratará de despejar las dudas que pueda tener Cometa-SRM sobre la valoración de su propuesta. Es posible también que a este encuentro acudan miembros de la consultora Lehman Brothers, encargada del estudio y la valoración de las dos ofertas.
El consorcio Cometa-SRM manifestó su disconformidad con el resultado del concurso, pocos días después de que Borrell diera como ganador a Airtel. El grupo perdedor anunció que estudiaría la posibilidad de recurrir el fallo.
