Las empresas declaran que el 27% de sus trabajadores no llega al salario mínimo
Un porcentaje importante (el 27%) de los asalariados cobraron en 1992 sueldos por debajo del salario mínimo interprofesional. Éste es uno del los principales resultados de la estadística sobre empleo, salarios y pensiones en las fuentes tributarias, elaborada por el Instituto de Estudios Fiscales por primera vez en España. De este informe se desprende que las mujeres cobran menos sueldo que los hombres en la empresa privada (el 61%) y que la mayor parte de los pensionistas obtienen las prestaciones minímas en cada modalidad.
El estudio, presentado hace unos días, está realizado en base a la declaración anual de retenciones que sobre 17 millones de asalariados, presentaron durante el mes de enero pasado más de un millón de entidades (1,076 millones entre empresas, la Seguridad Social, etcétera) sobre los pagos efectuados en 1992. En estas declaraciones anuales, una empresa, por ejemplo, debe informar a Hacienda no sólo de la retención practicada en todo el año a sus empleados, sino también del sueldo abonado.La explotación por primera vez de estos datos tributarios a efectos económicos tiene la virtud, frente a la estadística tradicional, de que proporciona una medida directa de sueldos y pensiones en base a datos individualizados. Pero presenta también algunos inconvenientes, por ejemplo, que a la hora de medir el empleo está sesgada al alza porque no descuenta la rotación que se da en los puestos de trabajo, lo que tiene un efecto importante dado el gran número de contratos temporales y a tiempo parcial. Tampoco incluye, como es lógico, la economía sumergida o aquellas entidades que sí ingresan sus declaraciones periódicas de retenciones pero no proporcionan a Hacienda la información anual. Éste último efecto está calculado en un 9,7% del total.
Una de las conclusiones más interesantes del estudio es que un 21% de los asalariados obtuvieron en 1992 retribuciones por debajo del salario mínimo interprofesional que en aquel año era de 788.000 pesetas / año. Así, por debajo del SMI cobraron algún tipo de retribución casi tres millones de personas (2,97) en ese año, sobre un total de casi once millones de asalariados (10,94).
Economía oculta
Según el catedrático Luis Toharia, este porcentaje tan importante tiene dos posibles explicaciones: "que exista un problema de ocultamiento de rentas; es decir, que haya parte del salario que se pague fuera de la nómina o que haya un importante nivel de empleo a tiempo parcial o temporal". La encuesta, efectivamente, cuenta como asalariado a alguien que sólo haya trabajado un día durante todo el año; pero lo cuenta una sola vez, independientemente del número de empleos que haya tenido.Otro de los datos que se conoce por primera vez sobre una base individualizada es la diferencia salarial entre hombres y mujeres. Así, según el estudio, en ese año el 31% de los empleados de las empresas privadas eran mujeres y, el resto, hombres.
Además de ser menos, sus sueldos también eran más bajos. Así, las retribuciones de las mujeres representaron algo más de la mitad de las percibidas por los hombres. En las administraciónes públicas, las diferencias son menores. Aquí cerca de la mitad eran mujeres (45%) y cobraban el 90%.
La información sobre pensiones también es relevante, ya que indica una distribución "perversa": la mayor concentración de perceptores se produce justo en los mínimos en cada una de las modalidades (de viudedad, jubilación con cónyuge y sin cónyuge).
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