Oscuridad y buena musica
Como parte de la espléndida programación de Navidad y fin de año, Jean-Christophe Maillot da dos de cal y una de arena. En este caso, la arena es la novedad y el riesgo, mientras la cal es la tradición local con los ballets rusos de principios de siglo, y la de Balanchine, también tan ligado a la historia de la sala Garnier.Las tres creaciones están muy bien construidas y presentadas, con rigor y dinero, con medios y profesionalidad; otro problema diferente es que muestran a las claras esa aguda crisis en la creación coreográfica que sobrevuela todo el continente europeo. La pieza de Bertrand D'At intenta explorar las relaciones entre hombres jóvenes, pero a pesar del lujo del cantante en directo y de la excelencia técnica de los muchachos; el resultado deja mucho que desear.
Los Ballets de Montecarlo
Dichterliebe: Bertrand D'At / Robert Schumann; Watching Waters: Renato Zanella / Anton Webern; Dov'è la luna: Jean-Christophe Maillot / Alexandre Scriabin. Sala Garnier, Ópera de Montecarlo. 29 de diciembre.
La pieza de Renato Zanella, actualmente director artístico de la ópera de Viena, se pierde en una aséptica geometría.
Dov'è la luna es una pieza irregular pero en la que se puede ver que Maillot sigue siendo un artesano solvente y capaz de explotar las relaciones entre los bailarines, llevándolos hasta una cuerda floja donde pueden quedar desnudas soledades, pasiones y algún desvelo sentimental.