Anguita muestra su rechazo a pactar con el PSOE en ayuntamientos y comunidades autónomas
ANABEL DÍEZ / JAVIER RIVAS El coordinador general de Izquierda Unida, Julio Anguita, no logró mantener durante la primera jornada de la IV Asamblea de la coalición una actitud ambigua sobre posibles pactos poselectorales con el PSOE. Los intervinientes de todas las federaciones le forzaron, quizá sin quererlo, a hacer una declaración explícita. No hay diferencia entre "la derecha" y los que hacen "política de derechas", afirmó el líder de IU, quien añadió que no se puede "pactar en municipios o comunidades cuando no hay cambios en la política nacional". Anguita obtuvo ayer el 95,62% de los votos de los delegados a favor de su gestión, que tan sólo recibió tres noes y 31 abstenciones de Madrid y Aragón.
Como en casi todos los congresos, la intervención del máximo líder parecía vieja a primeras horas de la noche, cuando le contestaron los responsables de las federaciones. Anguita inauguró la IV Asamblea de Izquierda Unida con un discurso poco concreto, sugiriendo que los asuntos conflictivos quedaban para cuando se constituya el Consejo Político Federal, cuyos miembros se eligen la mitad en este congreso y la otra en las comunidades autónomas. Por la mañana, el secretario general del PCE evitó un disgusto a los renovadores de Nueva Izquierda al no hacer referencia a la política de alianzas. Éstos temían que si de esta asamblea salía alguna declaración sería para cortar cualquier posibilidad de pacto con el PSOE. Mejor, no hablar del asunto.Los oficialistas, prefieren no pronunciarse hasta después de los comicio! del 29 de mayo. "El ritmo lo ponemos nosotros y los demás que se sometan y quien tenga prisa que tome agua de azahar", dijo Anguita.
Así quedó la cosa, pero tras el debate de los representantes de las federaciones, Anguita se vio en la obligación de mostrar algunas de sus cartas. En su opinión, el PP es lo mismo que el PSOE y resulta muy difícil explicar un acuerdo en ayuntamientos o comunidades autónomas cuando se está totalmente en contra de la política del Gobierno. Esta posición fue avalada rotundamente por las delegaciones en la votación del informe de gestión que se produjo un minuto después: 744 votos a favor, tres en contra y 31 abstenciones.
Entre risas, algunos delegados ironizaban sobre su vuelta a las votaciones "a la búlgara".
Los intentos de algunos sectores de Nueva Izquierda de que, al menos, quedara claro que IU no tiene nada que ver con el PP quedaron frustrados. "Decir que nunca pactaremos con la derecha es situamos como un perro faldero tras los socialistas", dijo Anguita. Después reiteró que IU "pacta con quien le da la gana" y que si el PP llega a gobernar no será por culpa de IU "sino por culpa del señor González".
No sólo se debatió la política de alianzas en sí, sino quién tiene capacidad para decidir esos pactos: el Consejo Político Federal o las direcciones regionales. La opinión de la mayoría de que debe decidir la dirección federal sólo fue discutida por la delegación balear y un sector de la valenciana.
Además, Anguita dejó claro lo que entiende por "cohesión federal": "Las federaciones no pueden ser, en caso alguno, taifatos". Las palabras de Anguita coinciden casi literalmente con una reciente resolución del Comité Federal del PCE aprobada por unanimidad. Delegados ajenos al PCE comentaban el reforzamiento del poder de este partido dentro de IU a través de Francisco Frutos.
A pesar de los matices, nadie estaba ayer realmente descontento. La aprobación de la gestión de Anguita se hizo a mano alzada. La única votación secreta se producirá el domingo cuando se vote el Consejo Político, Federal, aunque la lista será cerrada y nada hace pensar que haya lista alternativa. La poca voluntad de pelea tiene que ver con las buenas expectativas electorales.
Las direcciones de Izquierda Unida QU) e Iniciativa per Catalunya (IC), su formación hermana, desactivaron ayer una de las cuestiones más polémicas que podían haber amenazado el consenso de esta asamblea: las relaciones de ambas fuerzas y el grado de autonomía de IC. Una comisión de ambas fuerzas estudiará un acuerdo que permita a IC tener voz y voto en las decisiones de IU sobre política exterior, defensa, política europea, economía y otras cuestiones de Estado, y a cambio se corresponsabilizarían de las políticas de IU en esos terrenos.
La sombra de la pinza planeó sobre el debate
Las metáforas de Felipe González fueron protagonistas indirectas de gran parte del debate de ayer en la Asamblea Federal de IU. Numerosos delegados, con el propio Julio Anguita a la cabeza, arremetieron contra la imagen que pintó recientemente en Cáceres el presidente del Gobierno de que IU ha hecho "una pinza" con el PP contra los socialistas.La sucesión de intervenciones dejó bien a las claras la profunda irritación que causa con la formación que lidera Anguita el uso que el PSOE ha hecho -y que va a prodigar de aquí a las elecciones- de esa imagen de la pinza.
En interpretación de Anguita, las acusaciones del PSOE de que IU forma una pinza con el PP responden "a un grito desesperado" de los socialistas. "El tema de la pinza no se lo cree nadie y no debemos arrugarnos". El líder de IU defendió su derecho a "hablar con el señor Aznar y a cenar con él de vez en cuando".
El líder de Izquierda Unida en Andalucía, Luis Carlos Rejón, mezclando lo político y lo poético, sostuvo que IU debe rebelarse contra los dos señores feudales, el señor A. (por Aznar) y el señor G. (por González) que quieren usar a IU como si fuese una servicial mesnada.
Rejón concluyó su intervención con un embate contra los socialistas. Citando las palabras que el escritor egipcio Naguib Mahfuz pronunció tras sufrir un atentado integrista, Rejón dijo como colofón a su discurso en el plenario: "Las hienas aullarán y los perros ladrarán pero la caravana llegará a su destino".
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