Tomar los sindicatos y sustituir a Antonio Gutiérrez
La estrategia de desgaste del Gobierno propugnada por el sector de Anguita en IU está explicitada en los documentos debatidos en las Jornadas del Área del Mundo del Trabajo del PCE celebradas en Madrid el pasado septiembre y en el mes de octubre en Andalucía.En estos documentos, bajo la tesis de que el Gobierno del PSOE "se ha corrompido tanto en la forma de hacer política. como en la política misma", el PCE* realiza un análisis feroz de las relaciones de los sindicatos con el Gobierno y les culpa de haber contribuido con determinados acuerdos a mantener el Gobierno de González.
Para los dirigentes del PCE hay que volver de nuevo a "tomar los sindicatos" Julio Anguita llegó a utiliza prácticamente esta expresión en su discurso en la fiesta del PCE- haciendo que la estrategia sindical "se inscriba en la estrategia de la izquierda real, de acabar con la hegemonía del PSOE y sustituirla por el bloque social y político liderado por IU".
La batalla por el control de CC 00 está teniendo una especial acritud en las filas de este sindicato. Los acuerdos que se han firmado con el Gobierno -pensiones, salario de los funcionarios o PER, por ejemplo han sido fuertemente criticados por los líderes del PCE, que han llegado al extremo de desautorizar a los militantes de CCOO en beneficio del SOC.
La batalla se va a dilucidar a lo largo del próximo año. El, congreso de CCOO es en enero de 1996 y Antonio Gutiérrez ya ha anunciado que se presentará a la reelección. Para el sector más cercano al PCE, Gutiérrez no es la persona que pueda llevar adelante un sindicato "que ponga al Gobierno contra las cuerdas". Por el contrario, el actual secretario general de CCOO propugna un sindicalismo cada vez más despolitizado.
Agotar la legislatura
De hecho, la unidad de acción de CCOO y UGT, y sus estrategias en las relaciones con el Gobierno, han cambiado sustancialmente desde la marcha de Nicolás Redondo. Hoy ambos sindicatos tienen un pacto no escrito de no contribuir a la caída del Gobierno socialista y, desde luego, no precipitar las elecciones generales. Para ambas centrales el objetivo es ahora la negociación e intentar sacar por esta vía sus reivindicaciones. En esta estrategia es una pieza importante Antonio Gutiérrez.Para UGT, Gutiérrez es el hombre que podría llevar adelante unas Comisiones Obreras que., cuando menos, no sirvieran de punta de lanza a la ofensiva en la que se haya inmersa IU y, concretamente, el PCE, fuerza hegemónica en esta coalición.
El sector duro de CCOO, que se nuclea en torno al presidente del sindicato, Marcelino Camacho intentará a lo largo de este año que Antonio Gutiérrez llegue debilitado al congreso o, incluso, con otro candidato enfrente. Agustín Moreno sería la alternativa al actual secretario general. En los órganos de dirección Gutiérrez cuenta con una holgada mayoría, pero le falla la estructura territorial -mucho más politizada-, que podría hacer que, aun ganando la reelección, haya de dirigir el sindicato sin todos los apoyos que tiene ahora.
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