El origen del problema

El caso de la urbanización del paraje La Riera, en Sant Pere de Torelló (Barcelona), trascendió hace más de un año (Véase EL PAÍS del 12 de septiembre de 1993) cuando las protestas vecinales obligaron al Departamento de Política Territorial de la Generalitat, cuyo titular ya era Josep Maria Cullell, a parar las obras. El Ayuntamiento las había iniciado sin que el plan de urbanización estuviera aprobado. En aquel momento estaba ya en trámite la querella de Carles Bru, concejal de ERC, por presunta prevaricación, falsificación en documento público y maquinación para alterar el precio de las del cosas contra Joan Vilaró, cuñado de Cullell, y Ramon Vaqué, alcalde de Sant Pere.Desde el primer momento se destacó que el fondo del asunto era la' existencia de una trama destinada a conseguir que Vilaró vendiera los terrenos de La Riera al Ayuntamiento a un alto precio -159 millones- .Los trámites urbanísticos y la actuación concertada de varios departamentos de la Generalitat indicaron que la operación tenía algún poderoso impulsor. Cullell ha aparecido ante la opinión pública como presunto valedor de los intereses de su cuñado en una época en la que era diputado a Cortes y concejal del Ayuntamiento de Barcelona.