El número de objetores baja drásticamente, pero aumentan los insumisos

El número de objetores al servicio militar ha descendido drásticamente en los tres últimos meses, por primera vez desde la guerra del Golfo, con una reducción de casi el 30% el pasado octubre. Por el contrario, siguen aumentando los insumisos, que se niegan a cumplir tanto la mili como la prestación sustitutoria. Entre hoy y mañana, el ordenador del Ministerio de Defensa asignará los destinos de los 224.155 mozos que deben incorporarse a los cuarteles en 1995.Durante los seis primeros meses de este año, el número de objetores creció espectacularmente, con 46.433 solicitudes, frente a las 26.376 del mismo periodo de 1993, lo que suponía un incremento superior al 75%. Sin embargo, en julio se inició un cambio de tendencia, con sólo 219 objetores más, menos del 3,5% de aumento, que se ha acentuado en los tres últimos meses.

En agosto se registraron por vez primera menos objetores que en el mismo mes del año anterior (302), lo que suponía una reducción del 6%; en septiembre, la disminución sobrepasó el 20% (1.469 solicitudes menos) y en octubre ha rozado el 30% (2.306 menos). Aunque en los 10 primeros meses de este año ha habido más objetores que en todo 1993 -68.822 frente a 68.209-, y en noviembre y diciembre aumentan las solicitudes, parece difícil llegar a los 100.000, como se pronosticó a principios de año.

Opinión pública

El secretario de Estado de Administración Militar, Julián Arévalo, ya se refirió el pasado día 7 en el Senado al "descenso radical del fenómeno de la objeción de conciencia". En su opinión, esta reducción se debe al plan aprobado el pasado 11 de marzo por el Consejo de Ministros, por el que 24.000 objetores deben incorporarse a la prestación en noviembre, a una "visión crecientemente peyorativa" del fenómeno de la objeción por la opinión pública y al hecho de que "los empresarios prefieren claramente contratar a gente que haya hecho el servicio militar", además de las mejoras introducidas en el cumplimiento de la mili. Por el contrario, la insumisión sigue ganando adeptos. Entre enero y agosto, 1.353 jóvenes se han negado a cumplir la mili y la prestación sustitutoria, por lo que ya pasan de 10.800 los insumisos, según el Movimiento de Objeción de Conciencia de Euskal Herria. El País Vasco y Navarra son las comunidades con más insumisos (3.799), seguidas de Madrid (1.691), Andalucía (1.211), Castilla y León (757) y Cataluña (747).

Pese al declive de la objeción, Defensa prevé que una cuarta parte de los 224.155 jóvenes que deben iniciar la mili en 1995 no se incorporen a filas. Por eso, la cifra de sorteados excede en un 25% a las necesidades de los ejércitos: 134.500 soldados de reemplazo diarios o 168.116 al año, pues la mili dura nueve meses. El proceso informático de asignación de destinos se iniciará esta mañana y está previsto que concluya 13 horas después. Los afectados podrán conocer su suerte a partir de las 16.30 de mañana, llamando al 902-111994.

Un 40% de quienes hagan la mili en 1995 percibirán también las gratificaciones, de entre 5.000 y 30.000 pesetas mensuales, previstas para los destinados forzosos a guarniciones extrapeninsulares o a unidades de especial penosidad, así como los cabos. Defensa iniciará de inmediato los reconocimientos médicos previos al servicio militar con una experiencia piloto en las provincias de La Rioja, Huesca y Cáceres. Posteriormente, mediante acuerdos con el Insalud y comunidades autónomas, se ampliarán al resto de España.