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GUERRA EN LOS BALCANES

EE UU trata de calmar las críticas europeas al prometer que no venderá armas a los bosnios

Estados Unidos, bajo el fuego graneado de los países europeos tras tomar la decisión de cesar la vigilancia del cumplimiento del embargo de armas a los musulmanes de Bosnia, intentó ayer capear las críticas aliadas. El secretario de Estado, Warren Christopher, aseguró desde Yakarta, donde se halla en visita oficial, que su país no enviará armas a los musulmanes bosnios y el Pentágono subrayó que la medida no debería tener repercusiones militares. El ministro de Exteriores británico, Douglas Hurd, crítico acérrimo de la medida, dijo sentirse "tranquilizado" por las explicaciones estadounidenses.

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La portavoz de Clinton, Dee Dee Myers, trató de reparar los posibles daños contra el liderazgo internacional del presidente e insistió en justificar su orden como inevitable a la luz de la decisión del Congreso de anteponer la solidaridad con el Gobierno de Bosnia a las relaciones con los aliados y con Rusia.A la vista de la tormenta política desatada en Europa y las, acusaciones de haber provocado una crisis de confianza en el seno de la OTAN, Warren Christopher restó importancia a las consecuencias militares de la medida: "No diré que no vaya a tener ningún efecto, pero tampoco diría que va a tener repercusiones significativas porque el embargo de armas va a seguir siendo controlado por otros".

Desde Yakarta, en donde se encuentra preparando la cumbre de jefes de Estado de los 18 países de la cuenca del Pacífico, a la que asistirá Clinton, el secretario de Estado añadió que Estados Unidos no tiene ninguna intención de suministrar armas al Gobierno musulmán y que los buques y aviones norteamericanos en el Adriático seguirán vigilando el cumplimiento del embargo de armas sobre los serbios de Bosnia y la prohibición de sobrevolar todo el territorio de está antigua república yugoslava.

En la explicación de los detalles de la orden presidencial, que está en vigor desde las seis de esta mañana (hora peninsular española), un alto cargo del Pentágono dijo que las armas no están llegando a los musulmanes por mar y que, en todo caso, los militares no discuten órdenes que además están muy justificadas: "Estamos obligados a cumplirlas, independientemente de que pensemos que son estúpidas o acertadas. De hecho, yo creo que ésta tiene mucho sentido: es una manera de decir y de dejar claro que EE UU cree que el embargo de armas a Bosnia es inapropiado e injusto".

El mando militar reiteró que las fuerzas estadounidenses en la zona "continuarán trabajando para reforzar el embargo sobre los otros Estados de la antigua Yugoslavia y la lucha contra los serbios, principalmente, porque son los agresores en esta guerra".

Entrenar a la Armija

Además de la pasividad de los buques y aviones norteamericanos por lo que respecta a los envíos de armas a los musulmanes, y de la decisión más grave de no compartir los informes de inteligencia sobre estos envíos con los aliados, el Congreso también aprobó que la Casa Blanca elaborará un plan para estudiar la posibilidad de entrenar soldados bosnios fuera de Bosnia. "El plan será enviado al Congreso a corto plazo", señaló el responsable del Pentágono.

En la ONU, mientras tanto, el embajador bosnio, Mohamed Sacirbey, celebró la decisión: "Será una señal que estimulará a otros países que han sido reacios a proporcionarnos medios para que nos podamos defender". Sacirbey no ocultó que su Gobierno lleva meses obteniendo armas a través de diversos canales.

El embajador británico ante la ONU, David Hannay, reconoció que la decisión norteamericana "sin duda supondrá complicaciones en el seno de la OTAN que habrá que discutir". "Complicará", añadió, "los esfuerzos para controlar el cumplimiento de las sanciones".

Belgrado, por su parte, mostró su preocupación y acusó a Washington de "crear las condiciones para una escalada de la guerra en Bosnia".

El Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá hoy, a petición de los Gobiernos bosnio y croata, pero no para discutir sobre el levantamiento del embargo de armas a los musulmanes, sino para tratar sobre la delicada situación en torno al enclave musulmán de Bihac, en el noroeste de Bosnia, donde los serbios han lanzado una fuerte contraofensiva sobre las tropas gubernamentales bosnias.

El prestigioso semanario alemán Der Spiegel, informa en su edición de hoy que Rusia, uno de los países más críticos con la decisión estadounidese, ha entregado de forma regular armamento moderno (procedente de la extinta RDA) a Serbia, contraviniendo el embargo de la ONU.

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