Clemencia

El pasado 1 de septiembre quedé gratamente sorprendida al conocer la noticia del indulto concedido por el rey de Tailandia a una ciudadana española condenada a cadena perpetua en aquel país hace cinco años. Pero cuál no fue mi asombro al leer que, en el mes de enero pasado, el ministro de Asuntos Exteriores, Javier Solana, entregó al primer ministro tailandés una carta del presidente del Gobierno, Felipe González, pidiendo clemencia para algunos de los presos encarcelados en aquel país.¿Ha olvidado nuestro Gobierno a los españoles que, condenados en Tailandia, fueron trasladados en diciembre del 91 y en años posteriores en virtud del tratado firmado entre los dos países? Nosotros estamos sufriendo las duras condiciones de un tratado que nos obliga a seguir cumpliendo en España la misma condena que nos impusieron en Tailandia, con la única diferencia de que aquí pode-

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mos disfrutar de los beneficios penitenciarios (reducción del tiempo de cumplimiento por trabajo, permisos y tercer grado).

Nuestras condenas oscilan entre los 20 y los 25 años, y esto supone, según las condiciones del tratado, que hemos tenido que cumplir en Tailandia un tiempo mínimo de cuatro años, que se convirtieron en cinco, seis y hasta siete años por la burocracia que implicaba ser los primeros trasladados.

Si a esto le sumamos los casi tres años que llevamos ya en las cárceles españolas, creo que merecemos ser tenidos en cuenta y que nuestro Gobierno no sólo pida clemencia para los españoles que siguen presos en Tailandia, sino también para los que seguimos cumpliendo la condena en nuestro país después de sufrir las cárceles tailandesas.-

CIS Victoria Kent (Yeserías).