_
_
_
_
CUMBRE FINANCIERA EN MADRID

El Banco Mundial y el FMI insisten en que tienen objetivos comunes con los alternativos

ELENA CASTELLÓ. Por fin, las dos partes se han visto las caras directamente en un debate público. Las organizaciones no gubernamentales (ONGs) que conforman el llamado Foro Alternativo, que están poniendo cada día el punto crítico a la cumbre financiera de Madrid, debatieron los problemas del desarrollo junto a representantes oficiales del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial. Los representantes de las instituciones de Bretton Woods intentaron -más bien en vano- convencer a los representantes de las ONGs de que todas las partes tienen objetivos comunes.

Más información
El Centro de Investigación para la Paz propone democratizar las instituciones de Bretton Woods

El jefe de relaciones externas del FMI, Hernán Puentes, y el vicepresidente del Banco Mundial para el Medio Ambiente y el Desarrollo Sostenible, Ismail Serageldin, que asistieron a la discusión, afirmaron que las dos instituciones tienen el objetivo común con las ONGs de reducir la pobreza y crear las condiciones para un mejor desarrollo. "SI la pobreza ha aumentado de manera insostenible en algunos países, es porque sus Gobiernos han aplicado de manera incorrecta las políticas de ajuste estructural, poniendo su carga sobre los más pobres", afirmó Serageldin.En un ambiente claramente hostil, que aplaudía enardecidamente las intervenciones de los representantes del Foro Alternativo, tanto él como Puentes se esforzaron, con cifras y de manera bastante didáctica, por explicar a los más de mil asistentes que abarrotaban el recinto las bondades de esas políticas de ajuste, insistiendo en que eran la única vía para mejorar el nivel de vida de los países del Tercer Mundo.

Responsabilidad política

"Los programas de ajuste no son un invento del FMI ni del Banco Mundial", dijo Puentes. "No son una opción, sino que se dan irremediablemente y el FMI y el Banco Mundial hacen que sean me nos dolorosos. Y producen resultados puesto que multiplican la tasa de crecimiento y reducen la inflación, lo que posibilita que aumente la inversión, y esto hace que mejore la calidad de vida".

"Esto es lo que criticamos precisamente a ambas instituciones: que no se responsabilizan de sus políticas y se escudan en que son los Gobiernos locales los responsables cuando los resultados no son los que esperaban", dijo la ecofeminista india Vandana Shiva. Shiva acusó al Banco Mundial de toda una lista de desastres que asolan a su país, incluida la epidemia de peste neumónica que se vive ahora allí "causada por la suspensión, hace dos años, del sistema de asistencia sanitaria" y "del bloqueo que se está haciendo a los independientes Bancos Verdes" que hacen préstamos a los agricultores, afirmó. Criticó el intervencionismo de ambas instituciones y afirmó que sus propios estudios reconocen que el 37% de sus proyectos son un fracaso y el 78% de los préstamos que realizan no cumplen las condiciones pactadas por ellos.

El belga Pierre Galand, que hace unos meses dimitió del grupo de trabajo entre las ONGs y el Banco Mundial, criticó duramente el concepto de desarrollo entendido como una carrera para que los países del Tercer Mundo alcancen el ritmo de los países desarrollados. "Este es un mito intolerable porque es imposible hacerlo de una manera razonable respetando la dignidad humana", dijo entre aplausos. Galan añadió que los pobres no van a salir de la situación de hambruna y enfermedades "con esas teorías del ajuste reestructural al que apelan el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial". "El desarrollo no es sólo un aspecto del crecimiento económico, es una cuestión social y política", concluyó.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_