Los serbo-bosnios amenazan con derribar todo avión que aterrice en Sarajevo
Los serbobosnios, encoraginados por el ataque de la OTAN, el pasado jueves, contra uno de sus carros de combate, y por el endurecimiento de las sanciones decretado por el Consejo de Seguridad de la ONU, han amenazado ahora, en una escalada sin precedentes, con derribar todo avión que aterrice en el aeropuerto de Sarajevo, según confirmó ayer un portavoz de la Fuerza de Protección de las Naciones Unidas (Unprofor) en la capital bosnia.La amenaza procede del oficial de enlace serbio en el aeropuerto, y ha sido tomanda muy en serio por Unprofor. Los vuelos humanitarios a Sarajevo, que sirven para alimentar a sus 380.000 habitantes, fueron suspendidos el viernes y estaba previsto su reanudación para hoy. Kris Janovski, portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), aseguró anoche que la despensa de Sarajevo está abastecida para dos semanas.
Por otra parte, el general Ratko MIadic, jefe militar de los serbobosnios y criminal de guerra según Estados Unidos, dejó caer nuevas amenazas en una carta escrita al jefe militar de Unprofor en la antigua Yugoslavia, el teniente general. Bertrand de La presle. En ella dice, en tono chulesco, que no puede hacerse responsable de la seguridad de las operaciones. de Unprofor en Bosnia-Herzegovina.
MIadic afirma en su misiva que el ataque de la OTAN contra un carro de combate serbio, el jueves, alcanzó varias casas y una escuela. La versión de la OTAN es que sólo se destruyó un tanque abandonado cuyos tripulantes habían sido advertidos con antelación.
A pesar de este tono, ayer se produjeron algunos avances. Tras una reunión en Pale, capital política de la Bosnia ocupada por los serbios, entre el líder de éstos, Radovan Karadzic, y el jefe de asuntos de civiles de Unprofor, Sergio Vieira de Mello, se acordó reanudar el suministro de gas a Sarajevo y convocar un encuentro entre serbios y musulmanes para restabablecer también el de agua y electricidad.
Rechazo a los mapas
Momcilo Krajisnik, presidente del Parlamento serbio de Pale, fue más lejos que su general [Mladic]: "Tenemos que orientar nuestras fuerzas hacia la defensa y en ese caso tenemos el derecho de elegir cualquier método". Krajisnik advirtió, además, que el rechazo del último plan de paz elaborado por el grupo de contacto (EE UU, Rusia, Francia, Reino Unido y Alemania) es irreversible. "El pueblo serbio ha rechazado los mapas y no existe figura política con autoridad para aceptarlos".
El plan de paz rechazado contemplaba la división de Bosnia en dos mitades. Un 51% para la frágil federación entre croatas y musulmanes y el 49% para los serbios. Éstos, que poseen hoy el 70%, se niegan a devolver un palmo de terreno. El rechazo serbio de los mapas ha vuelto a colocar a Bosnia en el disparadero.Los ministros de Defensa de la OTAN, que se reunirán el jueves y viernes en Sevilla, tratarán de este asunto. En el ambiente flota la amenaza estadounidense de levantar el embargo de armas que pesa sobre los musulmanes si los serbo-bosnios no aceptan el plan de paz antes del 15 de octubre. Francia y el Reino Unido, con miles soldados en el terreno, que de aprobarse retirarán sus soldados inmediatamente.
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