Industria propone una nueva ayuda de 90.000 pesetas para renovar coches de más de siete años

La Comisión Delegada para Asuntos Económicos examinará hoy el nuevo plan propuesto por el Ministerio de Industria para estimular las ventas de automóviles en España. Juan Manuel Eguiagaray y su equipo consideran que el primer plan de estímulo a la demanda, conocido como Plan Renove, es un éxito, y se disponen a prorrogarlo con el establecimiento de nuevas ayudas públicas para la renovación del parque automovilístico, que consisten ensubvencionar con 90.000 pesetas el cambio de coches con más de siete años de antigüedad, en lugar de las 100.000 pesetas y 10 años actuales. El plazo también será de seis meses, y comenzará después de que termine el presente, el 12 de octubre.

El Plan Renove II, que ahora se somete a la consideración del Gobierno, a través de la Comisión Delegada, mantiene la misma fórmula o procedimiento que su antecesor. El procedimiento práctico es el mismo: las 90.000 pesetas serán descontadas del pago del Impuesto Especial cuando se produzca la compra del vehículo que sustituye al achatarrado.Es probable que en la Comisión se suscite un debate a fondo sobre la cuantía de la desgravación por la posición en principio contraria de Economía, que desconfía radicalmente de los efectos benéficos de la desgravación fiscal y de su con veniencia política. Según las versiones más fiables, en el de partamento de Industria se consideró que 90.000 pesetas era la cifra máxima de la des gravación, pero antes se consideraron cifras más bajas, en torno a 70.000 pesetas.

La propuesta de un Renove II responde, según el esquema manejado por las autoridades industriales, a la conveniencia de sostener el crecimiento de la demanda automovilística, conveniencia que se apoya en un hecho económico relevante: el coste para la Hacienda pública del Renove I es, hasta ahora, inferior al previsto. La Dirección General de Tributos calculó en unos 20.000 millones de pesetas el lucro cesante por la desgravación establecida en el plan (12.133 millones).

Frente a la posición más liberal de Economía, cuyos analistas consideran que el sostenimiento de la demanda de automóviles se fundamenta en las posibilidades de gasto y, por lo tanto, en un entorno de recuperación ecónomica, al tiempo que cuestionan la validez de los estímulos fiscales, el vicepresidente Narcís Serra sí cree en los incentivos sectoriales. Ayer anunció en el pleno del Congreso que "el Ejecutivo aprobará diversas medidas para estimular la actividad del sector automovilístico", para continuar el esquema del Plan Renove I.

La Comisión Europea decidió ayer aplazar hasta el próximo 5 de octubre la aprobación del nuevo sistema de distribución de automóviles, plasmado en un proyecto de reglamento que concede mayor independencia a los concesionarios respecto a los constructores en el marco de la Unión Europea. La aprobación final se retrasó porque los comisarios europeos desean estudiar más a fondo el proyecto de reglamento, un texto muy criticado por los constructores. El nuevo reglamento establece básicamente que los concesionarios puedan vender coches de distintas marcas y realizar operaciones de venta fuera de las áreas asignadas por los fabricantes.

Éxito del plan

Los coches de más de 10 años que se han dado de baja entre ese mes y agosto, que han sido subvencionados con 100.000 pesetas por Hacienda, han ascendido a 121.133 unidades, según un estudio de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), por lo que el coste de este plan para el Estado ha ascendido a 12.133 millones. Frente a este coste, los ingresos obtenidos por el aumento de ventas en 85.121 unidades vía sólo el impuesto de matriculación (13%) y el IVA (15%) sobre un precio medio de 1,3 millones de pesetas por coche, se elevan a 30.875 millones. El impacto neto en las Arcas del Estado ha sido, por tanto, positivo en 18.742 millones.

Si se cumplen las previsiones de los fabricantes, que cifran en 120.000 el número de coches que se venderán entre abril y octubre, el beneficio neto fiscal se eleva a 26.526 millones. "Pero esto es sólo parte de los ingresos que se han generado a la Hacienda pública", señaló ayer Carlos Espinosa de los Monteros, presidente de ANFAC, durante la presentación del citado estudio. La recuperación del sector repercute a su vez en otros sectores, cuyo aumento de la actividad supone más ingresos para Hacienda.

Asimismo, el aumento de la producción nacional en 85.121 coches por efecto del Plan Renove han supuesto 2,6 millones de horas de trabajo adicionales, lo que significa que se ha prescindido de algunas regulaciones de empleo, con el consecuente ahorro para el Inem y las empresas. También aumentan los ingresos vía el IRPF que se grava a los trabajadores y vía las cotizaciones a la Seguridad Social aportadas por empleados y empresarios. Otra de las ventajas de este programa, añade ANFAC, es el efecto sobre la seguridad vial, el medio ambiente y el ahorro energético.