El ex director de la Policía acumuló en diez años un patrimonio inmobiliario de 200 millones

Carlos Conde Duque, relevado como director de la Policía este año y actual delegado del Gobierno en Castilla y León, forjó en 10 años un patrimonio de ocho fincas urbanas y rústicas, cuyo valor de mercado actual, según diversas estimaciones, ronda los 200 millones de pesetas, frente a los 42 millones que él declara haber invertido. Conde Duque compró la mayoría de ellas, en cuatro provincias españolas, tras su incorporación en 1987 a Interior. Conde Duque es el ex alto cargo de este departamento con más propiedades declaradas a su nombre, al margen del prófugo Roldán.

El ex director de la Policía no sólo defiende la legitimidad de su patrimonio. Lo ve escaso: "Está por debajo de mis posibilidades. Tengo 54 años y llevo toda mi vida trabajando. Todo mi patrimonio está declarado en Hacienda y registrado". No es el único caso. Más de media docena de ex altos cargos de Interior son titulares de, al menos, tres o cuatro propiedades urbanas en España, y otros muchos no bajan de dos.Conde Duque adquirió su primera propiedad en 1984. Se trataba de una finca de secano de 50 hectáreas en la localidad de Talayuela (Cáceres), por la que pagó, según datos registrales, un millón y medio de pesetas. En octubre de 1993, construyó en esa finca una vivienda de 198 metros cuadrados por un valor declarado de seis millones. Un mes después, la vendió por 29 millones a una empresa de la acaudalada familia Serratosa, de Valencia. "Tenía previsto desarrollar allí una granja, pero finalmente vi que era una locura y deseché la idea", según comentó a este periódico.

En 1985, compró un piso de 83 metros cuadrados en las cercanías de la Embajada francesa en Madrid, en una de las zonas más caras de la capital. Pagó entonces por él más de 10 millones de pesetas, siempre según el registro oficial correspondiente. Hoy, su precio en el mercado, según un reciente estudio de la empresa Técnicos Consultores de Inversiones (TCI), se situaría en, al menos, 40 millones de pesetas.

En 1987, tras entrar en el Ministerio del Interior como subdirector general de Gestión de la Dirección de la Policía, Conde Duque adquirió un piso de 53 metros cuadrados en el cotizado paseo de Pintor Rosales, de Madrid, por un valor declarado de un millón y medio de pesetas. Hoy, según el citado informe, su precio no bajaría de los 20 millones.

En 1988, se hizo con un chalé, a poco más de 10 kilómetros de Cambados (Pontevedra), una de las zonas más caras de la costa gallega. La casa consta de dos plantas y tiene 140 metros cuadrados habitables. Esta vivienda forma parte de un complejo turístico, en el que también compró el espacio correspondiente a 20 de los futuros 70 locales comerciales que allí se construirán, cuya superficie total es de 2.100 metros cuadrados. El precio escriturado por ambas fincas es de siete millones de pesetas, incluida una carga hipotecaria de seis millones. Un chalé idéntico al de Conde Duque se vende hoy en 27 millones de pesetas.

En 1991, cuando ocupaba el cargo de director general de servicios de Interior, Conde Duque adquirió un apartamento en una localidad de la costa gaditana por una cuantía declarada de poco más de cinco millones de pesetas. Esta vivienda forma parte de un aparthotel enclavado en el punto costero gaditano de mayor revalorización de los últimos años. El precio mínimo hoy del apartamento, según indican inversores locales, oscilaría entre los 15 y los 20 millones de pesetas. Ese mismo año 1991, en el mes de julio, Conde Duque es nombrado director general de la Policía, con categoría de secretario general. Su sueldo bruto, según sus propios datos, ha supuesto unos 12 millones de pesetas al año.

En marzo de 1993, compró dos fincas rústicas en tierra de secano en las proximidades de Majadahonda, al suroeste de Madrid. Por las dos fincas, que suman 13,5 hectáreas, pagó oficialmente 10 millones de pesetas. Estos 135.600 metros cuadrados, equivalentes a más de 13 campos de fútbol, supondrían, a su valor actual, unos 68 millones de pesetas, según vendedores de fincas colindantes. Conde Duque asegura que no llegó a comprarlas, sino que sólo ejerció una opción de compra sobre ellas. La escritura, no obstante, aunque incluye una posible "condición suspensiva" en la operación, cita como propietario al ex director general de la policía, y como tal aparece en el registro inmobiliario correspondiente.

Paradójicamente, como domicilio de Conde Duque en Madrid no figura ninguna de estas viviendas, y sí otra en la que está alquilado en régimen de renta limitada. La ley que regula tales alquileres prohíbe disfrutar de renta limitada cuando se posee otra vivienda en propiedad. El ex director de la Policía reconoce haber incurrido en una irregularidad.

Meses atrás, Conde Duque minimizaba en privado la cuantía de su patrimonio y lo reducía a tres o cuatro propiedades. Ahora, el delegado del Gobierno en Castilla-León que hoy vive en Valladolid por ocupar este cargo reconoce ser el dueño de las propiedades citadas, pero, frente a lo que evidencian las escrituras, asegura que casi todas las adquirió antes de 1982. "O los registros las han inscrito con retraso, o yo no recuerdo bien algunas de las fechas" señala.

Alquiler de "unas monjitas"

El ex director general de la Policía justifica así su patrimonio inmobiliario: "Llevo trabajando desde los 18 años y tengo lo que tendría un señor cualquiera de mi condición y situación". "Parece abultado", añadió, "porque nunca tuve necesidad de comprarme un piso grande en Madrid, ya que desde hace anos vivo en un vivienda amplia de renta antigua que me alquilan unas monjitas".

Conde Duque posee, sin embargo, dos pisos en dos lujosas zonas de Madrid, como son el paseo de Rosales y la puerta de Alcalá, cerca de la cual está la Embajada de Francia.

Entre 1977 y 1982, Conde Duque fue director general y delegado del Gobierno en el área metropolitana de Madrid, competente en materia urbanística. Su currículo le describe como un experto inmobiliario.