El vigilante que robó 360 millones a su empresa acaba su aventura en una cárcel suiza

La policía suiza acabó ayer con la aventura del vigilante José María Matás Almagro, de 27 años, presunto autor del robo de 360 millones a la empresa Ausysegur, de Molina de Segura (Murcia). El guardia jurado fue detenido en Ginebra, con 42 millones en su poder, a primera hora de la tarde. Matás se llevó supuestamente los 360 millones de pesetas el pasado 25 de agosto, tras amenazar con una escopeta a un compañero cuando entraba a trabajar en el turno de noche.La noticia fue confirmada por la delegación del Gobierno en Murcia, pero un portavoz declinó informar sobre los detalles de la detención y si se ha logrado recuperar la cantidad de dinero sustraída. Las investigaciones, según la delegación del Gobierno, continúan. Ayer tarde, Matás Almagro, prestó declaración ante el juez suizo que instruye el caso y posteriormente ingresé en la prisión ginebrina de Champ-Dhllonne.

El robo se produjo en la noche del jueves 25 de agosto. Matás, que entraba de turno a las diez de la noche, se apoderó de una escopeta, propiedad de la empresa de seguridad, y después de amenazar a un compañero se llevó parte del dinero que había en la cámara: oficialmente 360 millones de pesetas. En su precipitada actuación, Matás, según la denuncia, se dejó en la caja fuerte unos 20 millones de pesetas en monedas. Con las prisas, durante la huida, además perdió algunas sacas de dinero, aunque no ha trascendido la cantidad exacta que se llevó.

Un punto oscuro en este suceso es el poco tiempo de huida del que dispuso Matás, algo más de media hora desde que abandonó las instalaciones de Ausysegur (en un polígono industrial de Molina de Segura) y su compañero logró librarse de las esposas con que había quedado atado. Después de que éste avisara a la policía, se alertó a las fronteras para evitar su huida del país.

El delegado del Gobierno en Murcia, Eugenio Faraco, comentó hace días a los periodistas que las investigaciones policiales sobre el destino de Matás iban bien, y que esperaba que antes de 15 días se cerrara el cerco y fuera detenido. El padre de José María Matás, que vive en la pedanía de Aljucer, declaró a los medios de comunicación regionales que no se explicaba cómo su hijo había podido hacer "una cosa así", y le pidió que se entregara, "porque todo se solucionará".

José María Matás se había separado de su esposa hacía dos meses, y desde este tiempo trabajaba en Ausysegur después de haber estado empleado en otras compañías de seguridad. En las oficinas de Ausysegur en Murcia, ninguna persona autorizada quiso comentar nada ayer sobre la detención: "Oficialmente no sabemos nada".

El robo de Matás Almagro tiene un conocido antecedente: el de Dionisio Rodríguez, El Dioni, que en 1989 sustrajo 320 millones a la empresa Candi, en la que trabajaba como vigilante.