Desactivada en Basauri una bomba que recogieron por error los basureros

La Ertzaintza (policía vasca) desactivó ayer un artefacto con más de cinco kilos de explosivo que se encontraba en el interior de una bolsa que unos operarios de un camión de la basura habían recogido en la localidad vizcaína de Basauri, según informaron fuentes del departamento vasco de Interior.Un trabajador del diario Egin comunicó a la policía autonómica que había recibido una llamada en nombre de ETA que avisaba de la colocación de una bomba. El interlocutor etarra señaló que sobre las ocho de la mañana el artefacto camuflado en una bolsa había sido recogido por un camión de la basura en Basauri.

La Ertzaintza procedió entonces a localizar a los dos camiones municipales de servicio en el citado municipio, comprobando que uno de ellos estaba vacío. Los agentes trasladaron el otro vehículo hasta un descampado para inspeccionarlo.

Hacia las 11.55, la Ertzaintza localizó la bomba, compuesta por cuatro kilos de amosal y kilo y medio de amerital. El artefacto explosivo, que estaba preparado para estallar, contenía dos detonadores, un mando a distancia y un temporizador de seguridad.

Los operarios del camión de la basura creen recordar que recogieron la bolsa en la calle Lehendakari Aguirre, de Basauri. La Ertzaintza investiga cuál podía ser el objetivo del atentado previsto.

Contra la Ertzaintza

Mientras, la Coordinadora Abertzale Socialista (KAS) ha trasladado al recinto festivo de Bilbao su campana de acoso y desprestigio contra la Ertzaintza con la colocación de numerosos carteles contrarios al despliegue de la policía vasca horas antes de que comenzaran ayer las fiestas de la capital. vizcaína.Con lemas como Lo que se nos viene encima -el despliegue de la Ertzaintza en Bilbao está previsto para octubre- o Los cipayos también mienten, reprimen, torturan y asesinan -tratando de hacer un paralelismo con las Fuerzas de Seguridad del Estado-, el bloque KAS ha engalanado parte del recinto festivo.

En los carteles se exige la dimisión de los dos máximos responsables de Interior del Gobierno vasco, Juan María Atutxa y José Manuel Martiarena, y se pide la "democratización de la Ertzaintza" y la disolución de su Brigada Móvil, los antidisturbios de élite de la policía vasca.

El objetivo es azuzar los ánimos de los jóvenes abertzales, que reproducen todos los años los incidentes en el día grande de las fiestas de Bilbao -el próximo viernes- con la izada de banderas, y reconducir la protesta hacia el nuevo enemigo: los ertzainas.