Los funcionarios quieren recuperar el poder adquisitivo perdido desde 1993

Los casi dos millones de funcionarios verán subir sus salarios a la par con la inflación en 1995, tras dos años de una virtual congelación que ha provocado una pérdida de siete puntos en su poder adquisitivo. Los sindicatos creen que esa pérdida debe ser resarcida. El ministerio, en cambio, la considera "cosa del pasado", y quiere vincular cualquier subida adicional a los resultados "como empresa" de la Administración Pública.

Esos resultados, se evaluarían de acuerdo con el crecimiento de la economía, el control del déficit público, el éxito en la lucha contra el fraude y la mejora de los servicios, según informó ayer el secretario de Estado para las Administraciones Públicas, Constantino Méndez, al término de la reunión de la mesa de la función pública, a la que acudieron ayer representantes de UGT, CC OO y el sindicato de funcionarios CSIF. El ministerio, UGT y CC OO coincidieron en proponer un pacto plurianual y en discutir cláusulas de revisión para ajustar los salarios a la inflación real, en caso de que las previsiones fallen. Los representantes sindicales Daniel Alastuey, por UGT, y Carlos Sánchez, por CC OO, desmintieron que hubiera discrepancias entre ambas centrales. "Nos vamos con buen sabor de boca", comentó Alastuey, que se declaró dispuesto a mantener posiciones flexibles. Sánchez se mostró más cauto: "No se ha concretado ningún contenido importante". Las propuestas de las centrales no se restringen a las retribuciones, sino que incluyen aspectos como la estabilidad en el empleo, la reforma de la Administración y la formación profesional continua. El representante de CSIF, Enrique Alonso, fue el único en solicitar un pacto anual.