Rank Xerox salda la crisis con un pacto que sacrifica 159 empleos

Uno de los conflictos más representativos de la crisis madrileña ha tocado fin sacrificando 159 empleos, 76 empleos menos de los que pretendía la empresa. La dirección y los empleados de Rank Xerox han llegado a un acuerdo. La reducción de plantilla -de 1.385 empleados, la mayoría comerciales distribuidos por todas las provincias- se ha planificado de modo no traumático, a través de 45 prejubilaciones y 114 bajas voluntarias compensadas económicamente. Las indemnizaciones son de 600.000 pesetas por año trabajado o la cantidad correspondiente a 47 días por año, hasta un máximo de 40 meses.

El acuerdo ha costado cuatro meses de duras negociaciones, salpicadas de protestas en la calle de los trabajadores, disconformes con el expediente de regulación presentado por la empresa y que justificaba los despidos por causas económicas y organizativas. El plan sentencia el cierre de la planta de Coslada, una de las dos factorías de Rank Xerox, pero prevé la recolocación en la empresa de 24 de sus 60 trabajadores.

La dirección considera que con estas medidas queda cerrado en proceso de reestructuración y se sitúa en condiciones de afrontar el futuro inmediato de la multinacional en España.