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El servicio de retirada de coches prevé aumentar sus ingresos, pero no el número de grúas

Javier Casqueiro

Costa Castellana, Bilbao, Princesa, Huertas y las calles del casco histórico son las zonas de la ciudad más colapsadas de coches mal aparcados en las noches de los fines de semana. El Ayuntamiento dispone sólo de 12 grúas para actuar contra esa indisciplina. Los domingos y festivos, este dispositivo se reduce a cinco. Los resultados económicos de la Empresa Mixta de Tráfico (Emitra) en los últimos cuatro años parecen incuestionables técnicamente, pero, a pesar del inmejorable mercado potencial, son poco brillantes. La retirada de coches sigue sin aumentar.

La dirección de Emitra, de composición y capital en un 54% municipal y el resto en manos privadas, pretende modificar este año la tendencia a la baja de los últimos ejercicios y se plantea 700 millones más de ingresos que en 1993 -que serían prácticamente de beneficios-, pero con el mismo sistema de funcionamiento y con el mismo número de grúas que estos años atrás.La firma privada Bores Loring, SA, lleva auditando las cuentas de esta empresa desde 1991. Las conclusiones técnicas de esta consultoría califican como irreprochable la gestión de Emitra y la salvan de cualquier irregularidad. Una semana de gestiones resultó infructuosa para poder analizar con el gerente de esta sociedad, José Manuel Porras, esos balances.

Presupuesto mayor

El presupuesto de la empresa aumenta todos los ejercicios, como sucede también -por la inflación o el incremento de plantilla- con el capítulo destinado a abonar las nóminas del personal, pero no sucede lo mismo con la eficacia a la hora de retirar los coches mal aparcados en las calles. En la ciudad proliferan tanto los coches en dobles y triples files como encima de las aceras o taponando las salidas de emergencia de muchos inmuebles. Emitra lleva cuatro años sin aumentar su parque móvil de 125 grúas en servicio. Cada grúa retiró una media de 2,6 coches diarios en 1993 y el planteamiento de los directivos de esta empresa es alcanzar la cota de los tres coches retirados por cada grúa al día en 1994.Los mínimos beneficios registrados en 1991 o 1992 se tornaron ya en 1993 en pérdidas, a pesar de que en ese año el Ayuntamiento decretó que para retirar el coche de alguno de los siete depósitos que la grúa tiene repartidos por la ciudad había que abonar antes obligatoriamente la correspondiente multa de 15.700 pesetas. En esos depósitos caben, teóricamente, hasta 4.841 vehículos.

Los responsables de Emitra, sin embargo, son optimistas. En su avance económico sobre lo que sucederá a final de año se marcan objetivos jamás alcanzados, pero con un "planteamiento de servicio similar al del año l993". Es decir, continuar con las 125 grúas actuales, con sólo 17 los sábados, 5 los domingos y festivos, 3 las noches de los lunes y los martes y 12 las noches del resto de la semana.

La previsión de ingresos por retirada de coches de la calle se calcula en 2.694 millones, 701 millones más que en 1993. ¿De dónde procederá ese dinero? Sólo se sabe que la tasa por esta infracción se ha elevado este año 2.800 pesetas. Además, se pretende subir en 18.550 el número de servicios de la grúa. Pero ese capítulo sólo permitirá ingresar 52 millones más.

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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