Los grandes países industriales continúan la vía de una recuperación segura, aunque es lenta y desigual

ENVIADO ESPECIAL Los siete grandes países industrializados mantendrán la política macroeconómica basada en mejorar las condiciones de la oferta a fin de asegurar un crecimiento económico a corto plazo del 2,5% (previsión para el G-7 en 1994) sin apretar el acelerador de la demanda. El presidente norteamericano, el último en incorporarse a los planteamientos favorables a actuar sobre la oferta de la economía (funcionamiento de los mercados) se ha convertido en su más firme propagandista, al exhibir los buenos resultados, aunque frágiles, de la economía de EE UU.

Fue la presidenta del Consejo de Asesores, Económicos del presidente Clinton, la economista Laura D'Andrea Tyson, otrora defensora de un programa de estímulo económico público, quien el pasado viernes 8 explicó la filosofia del Gobierno norteamericano, al comentar que durante los primeros.. seis meses de 1994 se han creado en, su país 1,7 millones de nuevos puestos de trabajo o 287.000 empleos por mes. "Como otros informes recientes -dijo- el de empleo correspondiente al mes de junio pinta un cuadro de sana expansión con una inflación controlada... Hasta ahora la economía está en marcha para conseguir nuestro objetivo de sostenido crecimiento con baja inflación".Los estudios del Fondo Monetario Internacional (FMI) y de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) que manejan los llamados sherpas de esta cumbre, los técnicos y asesores de los jefes de Estado y Gobierno de los siete' indican que si bien las disparidades cíclicas entre los grandes países industriales constituyen aún la característica central de la actual coyuntura, existen posibilidades de una mayor sincronización. El Producto Interior Bruto (PIB) de los siete grandes pasará de crecer un 2,5% en 1993 a un 2,51/o en 1994, mientras que la inflación, medida por el índice de precios al consumo, se verá reducida del 2,8% al 2,4%.

Agujero negro

El agujero negro de esta recuperación es el desempleo: del 7,3% en 1993, cifra idéntica a la de 1992, experimentará, incluso en 1994, una ligera subida, al 7,4%. Solo en aquellos países donde la economía se ha recobrado en los últimos tres años, las tasas de desempleo registrarán, durante 1994, una caída: Estados Unidos cerrará con un 6,2%; Reino Unido, con un 10% y Canadá, un 10,8%. El paro crecerá, sin embargo, en Japón, Alemania, Francia e Italia.

La política macroeconómica ratificada por el G-7 apuesta por una gradual disminución del desempleo precisamente a partir de 1995, tras consolidarse las tendencias en curso y entrar en efecto en varios países las medidas de flexibilización y reforma de los mercados laborales (ver comunidado del G-7).

Las proyecciones indican que la inflación es el enemigo público número uno de la política vigente. En Estados Unidos, se prevé una desaceleración del 2,8% en 1993 al 2,4% en 1994; en Japón, del 3% al 2,8%; en Alemania, del 4,7% al 3%; en Francia, del 2,1 % al 1,9%; en Italia, del 4,3% al 3,8% y en Canadá, el país que exprimenta la mayor desaceleración, del 1,9% al 0,5%. El Reino Unido es el único de los siete que sufrirá una ligera subida de la inflación, del 3% al 3,2% en 1994.

Déficit y superávit

Entre los efectos de la desigual marcha de la recuperación en los grandes países industriales está el incremento en los déficit y superávit por cuenta corriente, que ha sido objeto de discusiones y comentarios entre los ministros de Finanzas del G-7. La idea es que dichos superávit pueden subsistir, a pesar de las exhortaciones tendentes a conseguir que países como Japón adopten. medidas para su corrección, ya que son el resultado de diferencias en el ahorro interno relacionadas con oportunidades de inversión que estimulan a los inversores a diversificar sus carteras, en el fa vorable contexto de la liberaliza ción de los movimientos de capitales. Entre otras, ésta es la razón por la que Estados Unidos, por ejemplo, ha insistido especial mente con iniciar una especie de post Ronda Uruguay, a fin de ex tender su alcance al sector servicios de la economía, por un lado, y de resolver eficaz y rápidamente las disputas comerciales que pudiesen, en la práctica, neutralizar los compromisos del GATT alcanzado finalmente en Marrakech.