Seis años de polémica
La reforma de la plaza de Oriente nació con una discusión bajo el brazo. Desde que se planteó en 1988 la necesidad de arreglar el entorno del Palacio Real, pocas polémicas han levantado tanta polvareda en Madrid.Febrero de 1988. El Gobierno municipal del PSOE asume una propuesta de Alianza Popular para reformar la plaza con un proyecto de Miguel de Oriol.
Diciembre de 1991. El Ayuntamiento (ya con gobierno del PP) presenta el plan de Oriol.
Mayo de 1992. La Comunidad de Madrid autoriza el inicio de las excavaciones arqueológicas en la plaza de Oriente, después de que el Ayuntamiento acusase a la Administración regional de intentar retrasar el proyecto.
Junio de 1992. La Comunidad apoya la reforma de la plaza, pero dice que no permitirá un centro comercial.
- El Colegio de Doctores y Licenciados en Filosofía y Letras advierte que el proyecto municipal de excavación arqueológica no es riguroso.
- Comienzan las prospecciones arqueológicas.
- La Comunidad advierte que la reforma de lo que es un jardín histórico necesita que se modifique el planeamiento.
- El director de Patrimonio de la Comunidad, Miguel Ángel Castillo, asegura que se han encontrado restos de la muralla de Madrid. A finales de julio aparecen restos del siglo IX.
Julio de 1992. Oriol rebaja el número de plantas (dos en vez de tres) y de plazas de aparcamiento (de 1.100 a 700). Elimina las escaleras mecánicas y prolonga la salida del túnel hasta la calle Mayor.
Octubre de 1992. Los arqueólogos concluyen sus trabajos: afirman que no han encontrado nada de valor.
- El Ayuntamiento calcula que la reforma de la plaza le costará 3.000 millones.
- El alcalde se muestra dispuesto a admitir cambios en el proyecto y asegura que la superficie de la plaza sólo sufrirá leves retoques.
- IU comienza a repartir folletos contra el proyecto entre los vecinos del barrio.
- La Comunidad considera insuficientes las excavaciones efectuadas.
- Vecinos de Centro expresan en un acto convocado por IU su deseo de que la plaza de Oriente se quede como está.
Diciembre de 1992. Los arqueólogos entregan sus conclusiones: es necesario seguir excavando en la mitad sur de la plaza.
- La Asamblea de Madrid acuerda (con los votos del PSOE e IU) vetar la construcción del aparcamiento bajo la plaza y exige un análisis detallado de las investigaciones arqueológicas.
- Oriol vuelve a cambiar su proyecto y tapa los aberturas en el medio de la plaza.
- El equipo de Gobierno del PP comienza la modificación del plan general para eximir de cumplir la ley a la plaza de Oriente que proyecta Oriol.
- La Comunidad advierte que no permitirá que se simultaneen las obras de construcción y las excavaciones.
Enero de 1993. Oriol incluye en su proyecto una pasarela sobre el túnel de la calle de Bailén para acceder a la catedral de la Almudena. El arquitecto del templo, Fernando Chueca, considera que no se resuelve la entrada a la catedral.
Febrero de 1993. El Ayuntamiento encarga una maqueta del proyecto de Oriol por valor de 14 millones de pesetas; paga 14,95 millones al arquitecto y le encarga dos informes por otros 30, y destina 14,7 a nuevos informes arqueológicos.
Marzo de 1993. IU organiza un referéndum entre los vecinos del barrio de Palacio. El 77% de los 1.536 votantes rechazó la reforma de Oriol. Un organismo consultivo de la Unesco desaconseja la ejecución del plan.
- La Escuela de Arquitectura de Madrid opina que la reforma afecta a la seguridad del palacio.
Mayo de 1993. Patrimonio Nacional afirma que el túnel de la calle de Bailén es innecesario y aísla al Palacio Real.
Junio de 1993. La Academia de Bellas Artes vota a favor del proyecto de Oriol, pero nueve académicos firman un escrito en contra.
- IU propone para la plaza de Oriente una solución sin excavaciones 25 veces más barata que la de Oriol.
Noviembre de 1993. El Ayuntamiento saca a concurso la reforma de la plaza.
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