El general de la pluma cargada
El general Manuel Fernández-Monzón de Altolaguirre, de 59 años, ha sido siempre un militar con la pluma cargada. Sus innumerables artículos periodísticos -ha publicado en Abc desde 1965- se han examinado cuidadosamente, sobre todo en épocas delicadas de la transición.El 20 de febrero de 1982 (un año después del golpe militar de Antonio Tejero), escribía en Abc: "Muchos de nosotros no nos hemos solidarizado con los actos que se cometieron aquel nefasto día de febrero, ni con los motivos que lo inspiraron, y por eso, por nuestra disciplina, se frustraron. Pero estoy seguro de que casi todos, por no decir todos, nos solidarizamos desde entonces con la desgracia de los que ahora van a sentarse en el banquillo. Su dolor y el de sus familiares es nuestro dolor".
En otro artículo, defendió la autonomía del Ejército (que dependiese sólo del Rey y no del ministro de Defensa o del presidente del Gobierno). Era la teoría que entonces mantenía la ultraderecha española, molesta con que los civiles mandaran a los generales. En otro texto se pronunció contra la amnistía a los militares ligados a la Unión Militar Democrática que se habían opuesto a la sangrienta dictadura de Francisco Franco. Y en alguno más reclamó veladamente el estado de excepción para "las Vascongadas", como él denomina al País Vasco.
En el franquismo, perteneció a los servicios de información del Ejército. Más tarde, compatibilizó su carrera militar con un alto cargo en la empresa aérea Spantax.
Fernández-Monzón, madrileño, casado y con dos hijos, no es un militar indocumentado. Terminó por libre la carrera de derecho y estudió también varios cursos de sociología.
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